martes, 27 diciembre 2011 14:00
Hija mía, los dolores de parto han comenzado.
Ha llegado el momento del nacimiento de un Nuevo Mundo, un Nuevo Comienzo.
Ahora se producirán muchos cambios en la Tierra de los que nunca se ha sido testigo.
Mi Padre celestial está enviando a mi amado Hijo, Jesucristo, para salvar una vez más a la humanidad de su maldad.
Tú, hija mía, serás testigo de una serie de acontecimientos que ya te han sido revelados.
No debes asustarte, pues esta limpieza es esencial para despertar a la humanidad, si se quiere salvar a las almas.
Los signos comenzarán como se predijo. Mis hijos deben aceptar estos cambios con un corazón humilde y contrito.
Rezad, rezad para que las almas desechen el pecado de soberbia y busquen el perdón por sus ofensas a Dios Padre.
Si no se redimen, recibirán un severo castigo.
La Misericordia de mi Hijo es tan grande que dará tiempo a mis hijos para arrepentirse.
Pero debes rezar ahora por todas las almas para que sean dignas de entrar en la Nueva Era de Paz.
Tu amada Madre
María, Reina de los Cielos
jueves, 27 diciembre 2012 18:20
Mi queridísima hija, este es un Mensaje de gran esperanza para todos Mis hijos.
El tiempo de los cambios, como se predijo, cuando la tierra gire; los planetas cambien y los climas ya no sean predecibles, está sobre vosotros.
Mi Gran Poder se está manifestando ahora en el Cielo, como en la tierra, mientras dirijo la batalla contra Mis enemigos. Satanás y sus demonios están siendo derrotados, pero oponen una terrible defensa. Con ellos, chupan a Mis pobres hijos, cuyos corazones están llenos de ambiciones políticas y mundanas, para que jueguen un papel, mientras intentan crucificar a Mis hijos.
El hombre es débil. El hombre es fácilmente seducido. Debido a su ceguera a la Verdad, establecida por Mí, desde el principio de la Creación, el hombre cree en mentiras. El cree las mentiras, vomitadas por el maligno, porque es atraído por las promesas de poder y placer.
Mis hijos deben reconocer la gloriosa y esplendorosa Luz de Mi Reino. Tú, hija Mía, has visto esta Luz y sabes lo poderosa que es. Conoces el Poder de Dios y como te envuelve. ¿Puedes imaginar cómo será esto cuando Mi Nuevo Paraíso sea revelado? Tú, hija Mía, has vislumbrado sólo una pequeña porción de esta gloriosa y resplandeciente Luz.
Es importante acoger la Luz de Mi Hijo en vuestros corazones. Cuando le invitéis a salvaros y a acogeros en Su Sagrado Corazón, sentiréis esta Luz.
La Luz del Nuevo Amanecer -la Nueva Era- iluminará el mundo lenta pero inexorablemente. Pronto se verá una nueva Luz, un nuevo sol. Será más grande y será la causa de muchas maravillas.
Este es un signo de Mi Poder y Mi Majestad. Será un milagro y demostrará que el hombre no comprende plenamente el secreto de la Creación.
Sólo Yo, Dios Creador del Universo, mando todo lo que es. Todo lo que será. Todo lo que puede ser. Ningún hombre, ningún científico, puede resolver estos secretos más sagrados, ya que no es para que el hombre entienda en este momento.
Las maravillas de Mi Creación, y la fuerza de Mi Poder, serán mostradas al mundo. Que ningún hombre cometa el error de creer que Satanás, y sus malvados seguidores, tienen algún poder para traeros las maravillas que Yo he Creado para cada criatura. He prometido revelar la Verdad para que vosotros, hijos Míos, podáis limpiar las telarañas que cubren vuestros ojos.
Cuando llegue el Día en que la Verdad sea finalmente aceptada por ti, te concederé las más espléndidas riquezas, gracias y una vida que nunca podrías imaginar, pues está más allá de tu imaginación.
Me complace transmitirles hoy este Mensaje de esperanza. Espero que les traiga mucha felicidad y paz.
Mi Promesa, de llevarte a tu herencia final, se hará realidad, pronto.
Tu Padre amoroso
Dios Altísimo
sábado, 27 diciembre 2014 12:55
Mis queridos hijos, debéis confiar siempre en la Santa Voluntad de mi Hijo porque Él sólo permitirá que tanto mal envuelva al mundo porque Su Misericordia es muy grande.
Cuando mi Hijo interviene en cualquier acto que cause profanación de cualquier tipo, lo hace para preservar la fe. La Palabra de mi Hijo es sacrosanta y Su Voluntad es Suya para hacer lo que desea. Tu voluntad es tuya pero, si es entregada libremente a Dios entonces solo Su Voluntad puede ser hecha.
Confía, confía, confía en mi Hijo porque todas las cosas están de acuerdo con Su Voluntad. Si Él permite que el mal prospere, y que Sus seguidores sean engañados por Sus enemigos, entonces esto está dentro de Su Voluntad y se hace para probar la fe de los fieles. La Voluntad de Dios es un misterio para la mayoría de ustedes y Él puede decidir lo que sea necesario para el bien de la humanidad, en cualquier momento.
Deben permitir que sus corazones permanezcan en paz en amor y confianza por mi Hijo, Jesucristo. Él está muy presente entre vosotros y debéis estar agradecidos por ello porque sin Su Santa Presencia, la oscuridad cubriría la tierra.
Tu querida Madre
Madre de la Salvación