Falsos profetas tratando de desvirtuar Mi Santa Palabra

miércoles, 26 octubre 2011 15:30

Mi muy querida y amada hija, por favor dile a Mis hijos que estén alertas a los falsos videntes que hablan en Mi Nombre, pero que promueven palabras que no vienen de Mis Labios.

Muchos de estos autoproclamados videntes, que aparecen en el exterior como católicos y con todos los amaneramientos asociados a ésta y otras doctrinas cristianas, son en realidad seguidores de la nueva era.

Los seguidores de la Nueva Era se infiltrarán ahora en el mundo para convencer a Mis hijos que ellos han sido enviados para promover Mi Santa Palabra. Sus palabras parecerán ser verdaderas. El lenguaje que ellos usan será sofisticado, amoroso, bien pensado, pero enmascarará una mentira.

Esta es la era para que los falsos profetas emerjan y muchos de Mis hijos encontrarán difícil discernir la Verdad de la ficción.

Tú, hija Mía, eres ahora el objetivo de estos visionarios que se han propuesto desviar la atención de Mi Santa Palabra. No permitas que esto suceda o Mis hijos serán absorbidos por una oscuridad de la que les será difícil desenredarse.

Recuerden esto. Estos falsos profetas son también Mis amados hijos, así que por favor oren por ellos. Tristemente, han sido mal guiados a creer en una jerarquía imaginaria y en un universo que no existe.

Desconfía de aquellos que se refieren a maestros ascendidos o que hablan de una nueva era de luz donde Dios Padre es visto simplemente como una faceta más. Estas almas no reciben dirección de Mí. Están adoptando creencias inculcadas por el engañador. En muchos casos estas almas engañadas creen que están recibiendo mensajes Divinos. Así es como Satanás trabaja. Sus palabras suaves y tranquilizadoras producirán una letanía de palabras crudas y frías, pero convincentes. No vienen de Dios el Altísimo.

Como ya le he dicho antes, me dirijo al mundo de forma sencilla. No me sirve el lenguaje colorista disfrazado de voz fría y superior. Intento no infundir miedo en vuestros corazones. Simplemente trato de llevaros a la Verdad y a la importancia de amar al prójimo.

Qué difícil es para vosotros, niños, en estos tiempos confusos.

Rezad, rezad para que no seáis víctimas de una serie de falsedades, que serán difundidas por falsos profetas. Si sus mensajes os parecen artificiosos, difíciles de entender y os infunden miedo, no vienen de Mí.

Hijos, concentraos sólo en Mí. Tengo mucho que deciros. No os distraigáis ni un minuto, porque eso os impedirá salvar a las almas que tanto necesitan vuestras oraciones.

Tu Jesús

Espera ahora nuestro glorioso reencuentro

miércoles, 26 octubre 2011 22:00

Mi amada hija no debes preocuparte por los constantes ataques que se hacen a Mis mensajes por parte de falsos visionarios.

Ya debes saber que cuando hablo a mensajeros elegidos siempre serán objeto de odio. Cuando seas atacado recuerda que yo también soy desafiado. Mi Santa Palabra es desmontada, analizada, cuestionada, criticada y declarada indigna de salir de Mis labios.

Oh, qué poco saben Mis hijos. El miedo y la sospecha les ciegan a la verdad. Se sorprenderán también de cómo Mi palabra es desechada tan fácilmente en favor de falsos mensajes.

Como La Advertencia está casi sobre el mundo la verdad finalmente será dada a conocer a todos Mis seguidores. Será en esa etapa que ellos abrazarán Mi palabra para santificar sus pobres almas. Cómo les daré la bienvenida y les acercaré a Mí cuando sus lágrimas se mezclen con las Mías en amor y unidad. Antes de la Advertencia seguirán dudando, pero no me negarán después de venir ante Mí. Porque una vez que vengan ante Mí y vean el amor que les tengo, no querrán separarse de Mí ni un momento, tan profunda será nuestra unión.

Espera ahora nuestro glorioso reencuentro.

Tu Jesús

Cuestionarán y analizarán Mi Palabra por miedo a cometer un terrible error

viernes, 26 octubre 2012 11:06

Mi muy querida y amada hija, tanto trabajo necesita ser hecho por Mis seguidores para purgar la tierra de la infestación, que se extiende, como una manta, sobre mucha gente que no cree en Dios.

Muchos vagan por el mundo sin ningún sentido de dirección. Están vacíos de sentimientos espirituales y son ignorantes del Amor de Dios. Son las almas que anhelo y a las que deseo abrazar con la Verdad.

Ustedes, Mis seguidores, deben ir a ellos y decirles que Yo, Jesucristo, el Hijo del Hombre, El Mesías, vendré pronto. Deben saber que no serán desechados, porque es por ustedes, de esta generación, que vengo en este tiempo.

Muchos otros, que son espiritualmente conscientes de la existencia de Dios, tendrán curiosidad, pero dudarán en aceptar Mis Mensajes.

Otros, que proclaman Mi Palabra, y que son cristianos devotos, serán cautelosos y lentos para abrazar todo lo que digo.

Cuestionarán y analizarán Mi Palabra por miedo a cometer un terrible error. Temen ser alimentados con una mentira.

Luego estará el clero en las iglesias Cristianas que se levantarán y responderán a Mi Llamado. Algunos responderán rápidamente, porque sentirán Mi Amor correr por sus venas cuando lean Mis Mensajes.

Otros sentirán un llamado instantáneo a través de Mi Don del Espíritu Santo, contenido en Mi Santa Palabra. Algunos serán más cautelosos que otros, pero, con el tiempo, su número aumentará a millones.

Es por esto que ustedes, Mis seguidores, deben perseverar. Aunque muchos os rechazarán, en Mi Nombre, al principio, esto cambiará. Cuando la Verdad sea ampliamente conocida y bienvenida, ustedes serán buscados. Mi Palabra será tratada con amor y respeto, aunque al hacerlo, estas almas sufrirán.

No importa cuánta oposición haya contra Mí, porque Mi Misión no fracasará.

Soporta tal oposición. Acepta el abuso que te será infligido a causa de estos Mensajes.

Esto es de esperarse, cuando la Palabra de Dios es derramada sobre la tierra. Aquellos en la oscuridad no aceptarán Mi Palabra, ya que perturbará sus vidas.

Les hará reevaluar sus creencias, algo a lo que no querrán tener que enfrentarse.

Aceptar Mi Palabra significaría que tendrían que cambiar sus costumbres. Lamentablemente, ellos no desean cambiar sus costumbres, porque no les atrae.

No descansaré hasta abrir sus ojos a la Verdad. Tampoco, espero que ustedes, Mis discípulos, se detengan hasta que tantas personas como sea posible se unan, como una sola, a los Ojos de Dios.

Tu Jesús

Los que humillan Mi Palabra, entregada a ti, hija Mía, Me cortan hasta el hueso en dolor agonizante.

viernes, 26 octubre 2012 18:00

Mi querida y amada hija, Mi Reino en la tierra está a punto de hacerse realidad.

Por tanto tiempo prometido por Mi amado Padre Eterno, el Nuevo Reino, el Nuevo Paraíso es el regalo más grande.

El secreto para comprender Mi Nuevo Reino reside en el misterio de Mi sufrimiento en el Huerto de Getsemaní. Cuando caí postrado ante Mi Padre, llorando de dolor, fue por la pérdida de almas en el futuro que arderían en las llamas del Infierno, a pesar de Mi Sacrificio en la Cruz.

Mi humillación a manos de Poncio Pilato no Me fue dolorosa por el escarnio público, sino porque sabía que esas mismas almas se perderían para Mí. Y por eso lloré lágrimas de tristeza al verlas engañadas por Satanás, una fuerza maligna que no podían ver pero que infestaba cada fibra de su ser.

Cuando Me ves, hija Mía, preocupada es por una buena razón. Yo también lloro por las almas que desprecian estos mensajes. Ellos no están en el estado completo de estar en unión Conmigo. Debido a su pecado de orgullo, arrogancia, falta de conocimiento y humildad, insultan Mi palabra.

Luego tratan de impedir que los corazones de aquellos, a los que deseo llegar, abracen Mi Santa Palabra.

Por ellos también lloro porque no conocen las serias consecuencias de sus acciones mientras traicionan Mi Verdadera Palabra, como está siendo presentada a cada uno de los hijos de Dios, en este tiempo.

Tantas almas, privadas de Mi Palabra, a causa de las acciones de aquellos que dicen representarme en el mundo, se perderán.

Así como sufrí una terrible agonía, al enfrentarme a las burlas de los que estaban junto al trono de oro de Poncio Pilato, sufro hoy. El dolor que sufro, a través de ti, hija Mía, no es diferente hoy de lo que fue entonces.

Aquellos que humillan Mi Palabra, entregada a ti, hija Mía, Me cortan hasta el hueso en agonizante dolor.

Ellos han clavado los últimos clavos, a través de Mi alma sufriente mientras intento, una vez más, salvar a la raza humana de la destrucción.

Reza para que Mi Padre, por Su Misericordia, sea tolerante con tales almas que se esfuerzan, de la mano del engañador, en hacer impotente la Palabra de Dios.

Tengan cuidado hijos Míos de aquellos que vehementemente se oponen a Mi palabra, a través de estos mensajes. Deben orar por sus almas.

Tu Jesús

Amanecerá el Gran Día y pronto comenzará el mundo sin fin

sábado, 26 octubre 2013 11:15

Mi querida y amada hija, la fe de todos los hijos de Dios, independientemente de la denominación a la que pertenezcan, es tan débil que muchos de los que conocen la Verdad encontrarán muy difícil practicar su religión abiertamente, sin críticas.

Tantos en el mundo Me rechazan, Jesucristo, en este momento de la historia, que ya no es aceptable, en la mayoría de las naciones, hablar de Mí en público. Muy rara vez oirás hablar de Mi Nombre en los medios de comunicación, a menos que sea para cuestionar Mi Existencia. Rara vez oirás a la gente proclamar abiertamente su amor por Mí en público, pues lo encontrarían demasiado embarazoso. Incluso aquellos siervos sagrados Míos ya no están dispuestos a declarar la Verdad por miedo al ridículo. Aquellos que sí Me siguen encontrarán cada vez más difícil proclamar Mi Santa Palabra. Tantos, que una vez Me amaron, ya no lo hacen y Mi desolación y tristeza cortan Mi Corazón, como si una espada lo atravesara.

¿Por qué, oh por qué, me habéis abandonado? ¿Por qué los que creéis en Mí y Me conocéis hacéis daño a tantos de vuestros hermanos y hermanas? ¿Por qué prospera el odio en vuestros corazones? ¿Por qué sentís la necesidad de cuestionar los Evangelios ahora, cuando han existido durante tanto tiempo? ¿Quién os dio autoridad para malinterpretar Mi Palabra dada a Mis apóstoles? ¿Por qué los tergiversáis y por qué no creéis lo que Yo dije? Mi Palabra es muy clara. Cuando hablo, digo lo que digo. Si digo una cosa, no quiero decir otra. ¿Por qué habría de contradecirme, por ejemplo, y especialmente ahora en esta Misión?

Lo que se da a los profetas de Dios es la Verdad. Cualquier cosa que contradiga estos Mensajes, de la boca de aquellos que afirman que Yo hablo con ellos, debe ser rechazada por ustedes. Yo nunca competiría con Mi Propia Voz, porque debo asegurarme de que se os da la Verdad.

¿Qué debo hacer para que me escuches? ¿Qué debo hacer para que dejes de divagar y de buscar otras formas de excitación? ¿Por qué no confías en Mí? Perdéis tanto tiempo precioso buscando la adivinación, que fluye como veneno de la boca de los llamados místicos y buscadores de sensaciones, que Me insultáis alejándoos de Mí. Yo Estoy aquí. Estas son Mis Palabras. ¿Qué más buscas, pues sólo encontrarás la Verdad de Mi Boca? Yo hablé la Verdad cuando caminé sobre la Tierra. Dejé un legado de gran esperanza y salvación. Hablo la Verdad ahora, mientras te traigo Mis Palabras Finales, en este momento, porque el Gran Día amanecerá y pronto el mundo sin fin comenzará.

Cuando hablo, deseo que escuches. No puedo forzarte. Puedes buscar por todas partes y tratar de encontrar Mis Mensajes, dados para preparar al mundo para Mi Segunda Venida en este tiempo, y no los encontrarás. Mis Mensajes públicos para prepararte para esto, la etapa final antes de que se cumpla Mi Alianza, sólo pueden encontrarse en el Libro de la Verdad.

La Palabra es Mía. Mis Palabras serán oídas en cada nación. Nadie Me detendrá, porque Mi Poder es Todopoderoso.

Tu Jesús

No me quedaré mirando mientras destruís vuestras vidas, que pueden ser vuestras para la eternidad

sábado, 26 octubre 2013 17:52

Mi muy querida hija, cuando la gente trata de determinar a cuál de los hijos de Dios deseo traer Mi Misericordia - la respuesta es, a todos ellos. Yo no discrimino, porque amo a cada alma nacida, cada una de las cuales fue creada por Mi Padre. Ninguna alma puede ser excluida de esta Mi Misión final de salvar a la humanidad. Vengo a traer la salvación a todos.

Pregúntale a cualquier buen padre si sacrificaría a un hijo por encima de otro y te dirá lo siguiente: "No importa lo mal que se comporten o me hagan daño, nunca podré rechazarlos, porque son parte de mi carne" Lo mismo ocurre con los enemigos de Dios. Le ofenden y le causan un gran dolor, pero Él los sigue amando, porque proceden de Él, aunque estén hambrientos, a causa del pecado de la humanidad.

¿Cómo es posible, te preguntarás, que Yo pueda perdonar a los que más Me hieren? ¿Que azotan a los demás y les causan dolor y sufrimiento? Porque los amo. Siempre amaré al pecador. Sus pecados Me repugnan, pero siempre estaré esperando para abrazarlos.

Esta Misión trata sobre el perdón. Se trata de salvar vuestras almas. Aunque Mis Palabras puedan ser duras a veces, os son dadas porque os amo y no puedo soportar los pensamientos de perderos. Aquellos que Me han traicionado, debido a las ambiciones de la vida, nunca deben tener miedo de venir a Mí y pedir Mi ayuda. Te echo de menos. Estoy apenado, pero utilizaré toda intervención sin quebrantar la Alianza de libre albedrío de Mi Padre, que siempre seguirá siendo tuya hasta el nuevo comienzo. Nada de lo que hagas te separará de Mí cuando Me pidas perdón.

Yo envolveré al mundo en Mi Misericordia y por cada acto malvado llevado a cabo por Mis enemigos, para arrastraros al error, os prometo que intervendré. No os echaré a los lobos, que quieren devoraros. No me quedaré mirando mientras destruís vuestras vidas, que pueden ser vuestras por toda la eternidad. Os sostendré hasta el momento en que tengáis que tomar la decisión final. No soltaré vuestra alma tan fácilmente. Tuve una muerte cruel para salvaros. Esta vez, serás testigo de la más poderosa Intervención Divina para reconquistarte. Tú eres Mío. Yo soy tuyo. La bestia no ganará almas fácilmente, porque Yo Soy Dios, una fuerza formidable. Yo Soy Todopoderoso. Satanás no tiene nada, pero su astucia atraerá a los débiles entre ustedes. Os exhorto a todos vosotros, que Me amáis, a rezar para que los débiles acepten Mi Divina Intervención con amor en sus corazones.

Tu Jesús

A veces, lo que puede parecer injusto escapa a tu comprensión

domingo, 26 octubre 2014 23:10

Mi querida y amada hija, aquellos que Me niegan porque creen que si Yo existiera, un Dios Amoroso nunca permitiría el sufrimiento ni permitiría que ocurrieran tragedias inesperadas, enfermedades o muertes prematuras.

Dios da la vida y la quita como quiere y, por cada Acto de Dios, siempre saldrá bien de él, ya sea en el mundo en que vives, o en Mi Reino Celestial. Es la falta de confianza en Mí, lo que crea amargura en las almas que Me juzgan por actos que creen crueles e innecesarios. Lo que no saben es que hay un tiempo para todo -un tiempo para vivir y un tiempo para morir- y que Dios es el Autor de la Vida. Sólo Él puede decidir cuándo quitarla.

El sufrimiento a manos de otros es algo causado por el pecado, no por Dios. Cuando el hombre elige diferentes caminos en la vida, es enteramente por su propia elección el que toma. Algunos eligen sabiamente, de acuerdo con su propia conciencia, y entienden la diferencia entre el bien y el mal. Otros elegirán el camino que creen que les traerá las necesidades que necesitan para mantenerse en el mundo. Pero habrá quienes elijan imprudentemente y se embarquen en un camino de egoísmo, maldad y codicia.

Todas las cosas buenas vienen de Dios. A veces, lo que puede parecer injusto está más allá de tu comprensión, pero debes saber que Dios elige cómo recoger los frutos para el bien del hombre. Y, el sufrimiento forma parte de este Plan en Su Salvación de las almas. A Él no le gusta el sufrimiento, pero es una forma de purificación. Si sufres, Dios tratará de usar este sufrimiento para el bien de tu propia alma. Pero, Él nunca te forzará a hacer nada porque Él te da libre albedrío. El abuso de tu libre albedrío puede llevarte a un pecado terrible y, sin embargo, Dios nunca te quitará tu libre albedrío. El libre albedrío es sacrosanto. Fue dado libremente al hombre por Dios, y es el único Regalo que Él nunca te quitará. Es a través del libre albedrío del hombre, sin embargo, que el hombre cae de la Gracia y en el pecado.

El maligno juega con el libre albedrío del hombre a través de la tentación de los sentidos. El libre albedrío es un Don ya que, bien utilizado, puede dar gran Gloria a Dios. Pero, cuando se abusa de él para cometer terribles atrocidades, es utilizado por Satanás para maldecir a la humanidad.

La batalla por las almas terminará cuando el libre albedrío del hombre se haga uno con la Voluntad de Dios. Sólo entonces, el hombre será libre de todas las cosas, que le traen dolor y sufrimiento de cualquier tipo.

La Voluntad de Dios reinará en el mundo venidero, que no tiene fin.

Tu Jesús