domingo, 14 octubre 2012 18:10
Mi querida y amada hija, nunca creas, ni por un momento, que aquellos que cometen pecados terribles, y cuyas malas acciones causan atrocidades en el mundo, no pueden ser salvados.
Los que asesinan a sangre fría, ejecutan a sus compatriotas o matan a sus propios hijos, que aún están en el vientre materno, pueden salvarse gracias a vuestras oraciones.
Muchas de estas almas no buscarán redención en Mis Ojos, porque no ven nada malo en lo que están haciendo. Su salvación depende de vuestras oraciones.
Estas son las almas que más anhelo.
Estas almas perdidas están tan alejadas de Mí, que, sólo por el sufrimiento de las almas víctimas, y las oraciones de Mis discípulos, podrán ser salvadas.
Incluso aquellos que, a sabiendas adoran a Satanás, y que saben que Yo existo, pero que continúan burlándose de Mí, también pueden salvarse de la condenación eterna.
Os exhorto a todos a invocarme, a través de esta Oración de Cruzada, para buscar la redención de aquellas almas, en pecado mortal, que cometen asesinatos.
Oración de cruzada (80) Por las almas de los asesinos
Oh querido Jesús,
Te pido Misericordia para los que cometen asesinatos.
Te pido clemencia para los que están en pecado mortal.
Te ofrezco mis propios sufrimientos y dificultades, para que abras Tu Corazón, y les perdones sus pecados.
Te pido que cubras con Tu Preciosa Sangre a todos los que tienen malas intenciones en sus almas, para que puedan ser lavados limpios de sus iniquidades.
Amén.
Recordad que aunque sus pecados os harten, seguidores Míos, estas almas necesitan vuestra ayuda.
Han sido infestados por el maligno, y muchos de ellos no conocen la diferencia entre el bien y el mal.
Estas son las almas que Me causan mayor angustia y dolor. Mi sufrimiento se extiende para que cada una de ellas pueda ser redimida.
Id, discípulos Míos, y dejad que Mi Amor y Humildad inunden vuestros corazones para que podáis, con vuestra generosidad de sufrimiento, ayudar a salvar a estos pobres hijos perdidos de Dios.
Tu Jesús
lunes, 14 octubre 2013 15:30
Mi querido hijo, no creas ni por un momento, que cualquiera de ustedes es lo suficientemente fuerte, por sí mismo, para resistir las tentaciones que enfrentarán para darle la espalda a la Verdad - la Verdadera Palabra de Dios. Sin oraciones continuas, encontrarán que serán incapaces de levantarse y declarar la Verdad cuando se les presenten mentiras.
Todos vosotros debéis recitar las Oraciones de la Cruzada pues la oscuridad ya ha comenzado a descender sobre la Iglesia de mi Hijo en la Tierra y debéis estar preparados para ello a cada segundo.
A los sacerdotes de la Iglesia Católica, os exhorto a llevar siempre con vosotros las cuentas de mi Santísimo Rosario y una Cruz Benedictina. Debéis rezar mi Santo Rosario todos los días y vigilar a los que están en los rangos superiores de la Iglesia para ver quién reza mi Santo Rosario en público. Cuando se me venere, mi Santo Rosario debe ser rezado por todos los presentes ante mí. Si ellos, que dicen, conducen a los fieles a buscar mi asistencia ante el Trono de Dios, no pueden recitar mi Rosario, entonces necesitan vuestras oraciones. Presentarse ante mí, en busca de mi ayuda, sin rezar mi Rosario, carece de sustancia, pues es semejante a un soldado que va a la batalla sin armadura.
Mi Rosario es la oración más poderosa y, rezado diariamente, destruirá el poder del maligno. Aquellos, cuyas almas han sido oscurecidas por Satanás, encontrarán demasiado doloroso recitar esta oración. Por sus acciones sabréis quiénes son y debéis pedir a Dios, por la Misericordia de mi Hijo Jesucristo, que les ayude a acercarse a la Luz de Dios.
Tu querida Madre
Madre de la Salvación
martes, 14 octubre 2014 18:15
Mi muy amada hija, todo lo que revelé al mundo, a través de estos mensajes, se cumplirá. Muchos de los que conocen estos mensajes, tristemente, continuarán suprimiendo Mi Palabra. Otros, que no están al tanto de estos mensajes se opondrán a Mi Palabra, dada a ellos en los Santos Evangelios.
Llamo a todos los que caminan Conmigo en esta tierra, y les pido que confíen en Mí. Vivid según Mi Palabra y no moriréis. Vivid vuestras vidas, de acuerdo con la Verdad, y derramaré grandes Gracias sobre vosotros y sobre aquellos, cuyos nombres pongáis ante Mí. Cuando el mundo se sumerja en las tinieblas -cuando las guerras estallen por todas partes, y cuando la enfermedad y el hambre se apoderen de la humanidad- Mi Intervención será testigo. Protejo a todos los que se consagran a Mi Sagrado Corazón. Yo elevo a aquellos cuyos corazones pueden estar pesados, y traeré paz y una calma de alma a aquellos que Me pidan estos Dones.
Sólo Yo, Jesucristo, puedo aliviar tu carga. Sólo Yo puedo derrotar a vuestros enemigos y a aquellos que abusan del poder y de la influencia para destruiros en su propio beneficio. Sólo vosotros, Mis amados seguidores, podéis traerme las almas de aquellos que Me rechazan, que Me desechan y que Me niegan. Muchos de ellos nunca vendrán a Mí, aunque Yo los acojo en Mi Misericordia.
Debes continuar usando las oraciones que te fueron dadas. Permanece cerca de Mí porque cuando lo hagas, se te dará toda la protección contra el mal. Debes ser fuerte, valiente y mantener la calma porque Yo nunca me iré de tu lado. Caminaré contigo y te sostendré. Te consolaré. Enjugaré cada lágrima y, pronto, te envolveré a ti y a tus seres queridos en Mis Brazos Amorosos.
Las Llaves de Mi Reino, del mundo venidero, han sido preparadas y señaladas para todos aquellos cuyos nombres están en el Libro de los Vivos. Pero, Mi Misericordia es tan grande que Yo daré la bienvenida, en Mi Nuevo Paraíso, a aquellos cuyos nombres no están incluidos si ustedes Me traen estas almas, a través de sus oraciones.
Tu amado Jesús