Soy, ante todo, un Dios de gran misericordia

Mi amadísima hija, quiero que todos los que me amáis sepáis que os llamo, en este momento, para que vengáis a Mí como niños pequeños y os arrodilléis ante Mí.

Abran sus corazones y pongan su completa confianza en Mí. Luego pídanme, a través de Mi Amor por todos ustedes, que muestre Misericordia a aquellos que Me rechazarán, durante la Advertencia.Por favor oren por estas pobres almas perdidas que están tan distantes de Mí, ya que encontrarán extremadamente doloroso mostrar su rostro ante Mis Ojos que todo lo ven, durante la Iluminación de la Conciencia.

Me atormenta el dolor cada vez que miro a aquellas personas que no Me conocen ni comprenden lo que sucederá en el mundo, ya que Mi Tiempo está casi sobre ellos. Será casi imposible preparar a estas almas, porque nunca abrirán sus oídos a la Verdadera Palabra de Dios. Y así, ustedes deben, a través de sus oraciones, rogar por Misericordia para ellos. Yo los colmaré de Misericordia, pero será una tarea tortuosa.

Hago un llamamiento al mundo entero para que escuche hoy esta Llamada. Mi Tiempo, el Tiempo para que Dios finalmente se dé a conocer al mundo, en la mayor manifestación desde el momento en que Mi Corazón dejó de latir cuando morí en la Cruz, está casi aquí.

Cuando aquellos de ustedes que conocen Mi Promesa de venir otra vez se presenten ante Mí, les ruego que por favor oren, no sólo por sus propias almas, sino por las almas de los condenados. Recordad lo que os digo ahora. En ese día, quiero que Me pidan:

"Jesús, te pido Misericordia para todos aquellos que Te rechazan y que más necesitan de Tu ayuda. Amén".

Cuando Me pides que ayude a otros, puedo derramar Gracias muy especiales, en ese momento, sobre aquellos cuyo destino ha sido frustrado a causa del engaño del demonio.

Yo Soy, ante todo, un Dios de Gran Misericordia. Nunca olvides cuán grande es Mi Misericordia, porque siempre hay esperanza para aquellos que se han alejado de Mí. No hay nada que Yo no haría para traerlos a Mis Brazos Amorosos. Ayúdame a salvarlos.

Tu Jesús