Dios Padre: Ninguna evaluación científica tendrá sentido cuando se vean dos soles

Mi queridísima hija, Mi Deseo es reunir a todos Mis hijos, muy pronto, para ser testigos de Mi Promesa. Mi Gran Regalo vendrá en medio de la terrible persecución espiritual, cuando todo lo que Yo Soy será negado. Nuevos dioses, ninguno de los cuales existe, serán presentados al mundo. Cubiertos con una fachada resplandeciente, serán diseñados para detener toda creencia en Mi Existencia. Toda esta herejía extinguirá la Luz de Dios.

Pronto, las estrellas dejarán de brillar con su gran intensidad. Pronto, nuevos e inesperados signos, que desafiarán toda comprensión humana de la ciencia, serán mostrados por Mí, a un mundo incrédulo, al revelarse el comienzo de Mi Intervención. Ninguna evaluación científica tendrá sentido cuando se vean dos soles. Ninguna definición, por el limitado conocimiento del hombre, tendrá sentido. Sin embargo, ellos tomarán cada señal, dada al mundo desde el Cielo, y dirán que esta otra vida humana existe en el universo.

Yo Soy el Creador de toda vida. Yo creé al hombre. Yo he creado el mundo. Nunca niegues esto, porque cuando lo hagas estarás siguiendo una falsa doctrina. Cada intervención del Cielo - y habrá muchas - será explicada. Cuando veáis estos signos, sabed que el Día de la Segunda Venida está cerca.

Les pido, queridos hijos, que nunca Me nieguen o nieguen Mi Promesa de traer al mundo la paz final y la reconciliación, que es suya si la aceptan bajo Mis Términos y no los suyos. Mi Voluntad está a punto de cumplirse por fin. Para prepararte, presentaré al mundo muchos milagros en los cielos, en el universo y en el sistema planetario. Cuando seas testigo de estos acontecimientos, quiero que estés alegre, porque entonces sabrás que Yo Estoy anunciando el regreso de Mi Hijo para completar Su Promesa de salvación eterna.

Seca las lágrimas de tus ojos. Sé lo difíciles que serán vuestras pruebas. Me refiero a todos Mis Hijos, incluyendo creyentes y no creyentes, así como a los culpables de pecados terribles - ninguno de vosotros está excluido. Cuando os reconciliéis con Mi Hijo, formaréis parte de Él y reinaréis con Él en el Paraíso, para siempre.

Tu amado Padre

Dios Altísimo