Mi muy querida y amada hija, debo instar a todos los hijos de Dios a unirse y orar por Mi Iglesia en la Tierra.
Mi Corazón se agita en este momento, porque se está mostrando un gran odio hacia aquellos que son cristianos practicantes. La persecución de los cristianos continuará en todos los países y esto incluye a todos aquellos que tienen, en este momento, la libertad de practicar su homenaje a Mí. La mayor persecución será infligida por cristianos a cristianos. La flagelación de Mi Cuerpo en la Tierra será en su peor momento desde dentro, ya que el hermano se volverá contra el hermano y la hermana contra la hermana. Pronto veréis la declaración de las nuevas oraciones, que serán introducidas por la nueva liturgia.
Los principales cambios se referirán a la Santa Comunión, donde será presentada como algo, que tiene poca semejanza con Mi muerte en la Cruz, cuando entregué Mi Cuerpo por todos los pecadores. Al declarar que la Santa Comunión significa la unión de toda la humanidad, como uno ante Dios, Me insultaréis, porque esto sería contrario a la Verdad. La Verdad ya no significa la Verdad, porque muchos difunden mentiras, exageran y no comprenden con qué facilidad la Verdad puede ser manipulada. Cuando se tergiversa, de una manera sutil, muchos no notarán los cambios, cuando la Verdad no se cumple. Las mentiras tomarán el lugar de la Verdad, dividirán a la raza humana y crearán la separación de Dios, que conducirá a la destrucción.
Aprecia siempre la Verdad, porque sin ella el sol se oscurecerá, la luna ya no presentará luz cuando caiga la noche y las estrellas ya no brillarán en aquellos días que señalarán la oscuridad final, antes de que Yo venga a reclamar Mi Reino.
