Dios Padre: Este es un Llamado para la salvación de aquellos de ustedes que no cuestionarán las herejías a punto de ser declaradas

Mi queridísima hija, vengo a decirle al mundo que los enemigos que deambulan por la Tierra, bajo la apariencia de aquellos que dicen llevar la Palabra de Mi Hijo a las masas, ahora se han unido como uno solo. Como uno, traen todos sus poderes juntos y desfigurarán la Tierra con su malvado engaño.

Estoy preparado. Esperando. Tan pronto como introduzcan sus viles leyes, golpearé y el mundo será testigo de Mis castigos. Mis Advertencias han caído en oídos sordos y aquellos demasiado orgullosos para aceptar la Mano de la Misericordia, dada a vosotros a través de Mis Mensajes. Los líderes de aquellos que os perseguirán, en nombre de los derechos humanos, sufrirán por Mi Mano. Ellos creen que su poder es todopoderoso y que son invencibles, pero pronto sabrán que no son nada sin el Poder de su Creador.

Yo Soy el Autor de la Vida, y aquellos que decidan usar su poder para quitar la vida de Mis hijos, tanto en cuerpo como en alma, lo perderán todo. Cuando luchas contra Mis hijos y traicionas a Mi Hijo, Jesucristo, hay poca esperanza para ti. Yo no les concedo Mi Misericordia fácilmente, porque ustedes Me causan gran Ira. Sin embargo, Yo anhelo tu lealtad, pero te advierto de los peligros de jugar con el maligno. Os daré todas las oportunidades, para alejaros de los grilletes, que os atan a la impía trinidad. Debéis liberaros de las cadenas de Satanás. Vuestro tiempo es corto.

Te pido que mires a Mi Santa Biblia, los Evangelios, y busques las señales que te fueron dadas sobre la gran apostasía predicha, porque ha envuelto al mundo y se extiende como un virus mortal en cada parte concebible de tu sociedad. Habéis sido infestados y ahora vengo Yo, Vuestro Padre, para limpiaros de esta terrible aflicción. Debéis suplicarme ayuda, antes de que sea demasiado tarde para vosotros.

Ahora debes recitar esta Oración de Cruzada. Pídeme ayuda.

Oración de cruzada (124) Escucha mi súplica de libertad

Oh Dios, Padre misericordioso, Creador de todo lo que existe, escucha mi súplica de libertad. Libérame de las cadenas de la esclavitud y protégeme de la persecución maligna. Ayúdame a discernir la Verdad y ven en mi ayuda, aunque esté confundido y pueda dudar de Tu Palabra. Perdóname si Te ofendo y llévame al refugio de Tu Nuevo Paraíso en la Tierra. Amén.

Mi Tiempo, para declarar la Segunda Venida de Mi Hijo está cerca. El tiempo se moverá rápidamente y el reinado de Mis enemigos, aunque de corta duración, parecerá una eternidad, debido a la crueldad que mostrarán a Mis hijos. Ellos no mostraran lealtad, en absoluto, a esos hombres tontos, quienes juraran lealtad a la bestia. Así como el maligno Me odia, así odia a cualquiera de Mis hijos, tanto a los buenos como a los malvados. Este es un Llamado para la salvación de aquellos de ustedes que no cuestionarán las herejías a punto de ser declaradas. Debéis cuestionar y cuestionar cualquier duda, que invada vuestras almas, cuando estéis descontentos con cualquier nueva forma de doctrina, que no se sienta bien en vuestros corazones.

No he dado la autoridad para que ninguna nueva ley o sacramento, sea introducido en Mi Santísimo Nombre.

Tu amado Padre

Dios Altísimo