Todos los que lleven el triángulo, el signo de la trinidad más impía, se verán implicados en avalar dichas organizaciones benéficas

Mi muy querida y amada hija, cada rincón de Mi Iglesia está siendo preparado para los nuevos rituales. Las declaraciones públicas de la necesidad de ser humildes y bondadosos establecerán el precedente para la filantropía secular, que será introducida por el anticristo. Todos estos siervos de Satanás se están uniendo en celebraciones en privado y su red mundial creará organizaciones benéficas globales, establecidas para convenceros de que son de inspiración divina.

Todos los que lleven el triángulo, el signo de la trinidad más impía, participarán en el respaldo a esas organizaciones benéficas, para que eso las eleve a los ojos del mundo. De repente, se hablará de un nuevo y poderoso movimiento supuestamente evangélico y la gente entregará su dinero para ayudar a que crezcan sus esfuerzos por ayudar a los pobres del mundo. Todo el mundo creerá que se está haciendo un bien mayor y ciertos líderes de Mis Iglesias serán admirados en todos los rincones de la Tierra. Muy pocos discutirán sobre sus intenciones, pero cuando vean a los bancos más grandes del mundo unirse a ellos en sus esfuerzos, sabrán entonces que esto es un acto diseñado para engañarlos. Qué astuta es la bestia. Cuán astutas parecen ser sus acciones, porque estarán recubiertas de azúcar con una forma de engaño, que sólo aquellos bendecidos con el Don del Espíritu Santo serán capaces de discernir. Y durante toda la charla sobre el bien común del hombre, el deseo de unir a todas las religiones para formar una gran comunión de personas - ni una palabra será pronunciada sobre Mi Enseñanza de que los hijos de Dios deben permanecer firmes a Mi Santa Palabra.

Los tiempos se mueven rápidamente y en medio de esta propaganda, aparentemente bien ordenada y cuidadosamente orquestada, comenzarán a aparecer las grietas. Cuando Satanás está trabajando, la confusión se extiende; se crea división; las contradicciones se vuelven rampantes y nada es nunca ordenado. Desaparecerán ciertos honores que Me eran concedidos antes de Mis Tabernáculos. Se suspenderán las horas de Adoración Perpetua y pronto despojarán a las Iglesias de las estatuas de los santos. Todas sus acciones serán condonadas en nombre de desarraigar la Iglesia de antaño y hacerla más relevante, más atractiva y más atrayente para los no creyentes.

Aquellos que Me conocen deben hacer todo lo que puedan, a través de la difusión de los Evangelios, porque, estén seguros, no oirán hablar de la Santa Biblia. Las únicas citas que oiréis serán aquellas, que sean tergiversadas para apoyar mentiras. A medida que despojen a la Iglesia de su dignidad, los castigos comenzarán a caer sobre ellos desde los Cielos. Ellos, con el tiempo, serán detenidos, pero estas pruebas deben tener lugar primero, como se predijo.

Tu Jesús