Madre de la Salvación: Cada Sacramento será cambiado más allá del reconocimiento

Hija mía, cuando colocaron la Corona de Espinas sobre la Sagrada Cabeza de mi Hijo, no fue sólo para infligir una terrible tortura física, fue para hacer una declaración. Lo hicieron como un gesto simbólico. Estaban diciendo, mientras se burlaban de Él, que este Hombre, que dice ser la Cabeza de la Iglesia y que se llama a sí mismo el Mesías, no será tolerado. Ellos profanaron a la Cabeza de la Iglesia cuando lo coronaron y lo profanarán de nuevo durante estos tiempos.

No bastará con que ellos, los enemigos de Cristo, se apoderen de la Iglesia de mi Hijo desde dentro: lo profanarán de muchas otras maneras. Cambiarán las hostias de la Sagrada Comunión y el significado de lo que es la Sagrada Eucaristía. Dirán que Ella, la Sagrada Eucaristía, representa a la humanidad y que es un signo de una nueva comunión - una reunión de todas las personas como una sola a los Ojos de Dios. A vosotros, hijos míos, se os dirá que todos estáis en comunión unos con otros y que esto es motivo de celebración.

La Sagrada Comunión es el Cuerpo de Cristo y es Su Presencia Real. No pueden ser dos cosas diferentes. Sin embargo, tergiversarán el significado - todo lo que os quedará, finalmente, será un trozo de pan, porque cuando profanen los altares y la Hostia Santísima, cesará la Presencia de mi Hijo.

Cada Sacramento será cambiado más allá del reconocimiento. Tan astutos serán los enemigos de mi Hijo, que se verá que las santas ceremonias sólo han cambiado un poco. El Sacramento de la Confesión será abolido, porque la bestia no quiere que las almas sean redimidas, porque esto sería una victoria para mi Hijo.

Hijos, debéis seguir pidiéndome que interceda, para que se alivie el dolor de estos acontecimientos futuros y se acorte el tiempo.

Tu querida Madre

Madre de la Salvación