Fue el pecado de soberbia el que hizo que Lucifer cayera y fuera cortado y arrojado al abismo

Mi querida y amada hija, como Mi Palabra llega a muchos oídos, vengo a advertir a aquellos entre vosotros que no Me escuchan. ¿Qué es lo que teméis? ¿Es Mi Palabra o los cambios que tendréis que presenciar a medida que continúe la purificación? ¿No sabéis que no os traigo nuevas Enseñanzas, pues no es necesario? Sólo me comunico con vosotros para recordaros la Verdad.

Muchos de ustedes creen que saben mucho acerca de Mí, pero no han aprendido nada. ¿Quién eres tú para decir que eres mejor que otros a los Ojos de Dios, cuando se trata de interpretar Mi Santa Palabra? ¿Quien eres tu para creer que tienes la autoridad de blasfemar contra Mi, y luego decir que Me amas? No serás capaz de detenerme a través de los profetas, en alcanzar a los hijos de Dios. Debes preguntarte ¿por qué odias Mi Voz? ¿Cómo puedes amarme cuando destrozas Mis Palabras, cuando todo lo que estoy haciendo es ayudarte a prepararte para Mi Gran Día?

El hombre es muy débil. Incluso aquellas almas devotas son débiles, aunque su amor por Mí es fuerte. Que ningún hombre crea que puede caminar ante Mí sin la vergüenza del pecado sobre su alma. Ninguno de vosotros es digno de comparecer ante Mí, y sin embargo os concedo la Misericordia de Mi Amor. No es que ustedes sean merecedores de esto, es simplemente porque Yo escogí concederles este Regalo.

A aquellos de ustedes que afirman hablar con gran conocimiento de Mí y luego escupen con lengua maldita contra Mi profeta - sepan esto. Tu fe no te salvará cuando maldices la Palabra de Dios. Vuestro autoproclamado amor a Dios no tiene sentido cuando juzgáis a uno de Sus hijos ante Él. Estás cortando el cordón umbilical, que te une a Mi Padre, cuando muestras falta de respeto, ira y odio hacia Mí. Cuando me escupas, te quedarás ciego y nunca volverás a ver. Cuando pronuncies palabras de odio, tu lengua será cortada. Cuando te levantes y declares a todos tu autoproclamado conocimiento de Dios, caerás con las piernas cortadas. Cuando consideres malo a Mi profeta, no tendrás vida.

Mi Palabra nunca morirá; vivirá por la eternidad. Pisoteará a aquellos pecadores que intenten desafiar la Misericordia de Dios, a través de estos Mensajes. Rechazadme esta vez y rechazaréis la libertad que traigo cuando venga a reuniros, finalmente, en Mi Reino. No tenéis mucho tiempo para redimiros a Mis Ojos antes del Gran Día. No lo desperdiciéis por el pecado del orgullo. Fue el pecado de orgullo el que causó que Lucifer cayera y fuera cortado y arrojado al abismo. Todos los que le siguen, por el pecado del orgullo - el pecado que causa tanta separación de Dios - caerán y nunca se levantarán en la Presencia de Dios.

Tu Jesús