Será un aliado muy cercano del falso profeta y no se hace ilusiones sobre quién es: el hijo de Satanás.

Mi querida y amada hija, los tiempos venideros sacudirán al mundo de su letargo, independientemente de la religión que la gente siga, si es que sigue alguna, porque la voz del cuerno pequeño llamará la atención de todo el mundo. Sentado en la Cátedra de Pedro, este impostor gritará en voz alta y proclamará con orgullo su solución para unir a todas las iglesias en una sola. Aclamado como un innovador moderno, será aplaudido por el mundo secular porque condonará el pecado.

Él traerá nuevas leyes, las cuales, no sólo contradecirán las Enseñanzas de la Iglesia Católica, sino que irán en contra de todas las leyes Cristianas. Los sacerdotes que se oponen a estos Mensajes serán forzados a reconsiderarlos cuando la terrible verdad sea revelada. La Verdad de Mi Palabra, dada a ti, hija Mía, amanecerá lentamente sobre ellos al fin. Cómo llorarán de dolor cuando se den cuenta de que soy Yo, Jesucristo, Quien -con la Bendición de Mi Padre- te revela las profecías del fin de los tiempos con todo detalle.

Entonces devorarán cada Palabra de Mis Sagrados Labios mientras revelo más acontecimientos por venir, con el fin de preparar a la humanidad. Es esencial que el hombre escuche y responda a Mi Llamado, para que Yo pueda salvar a todos de las garras de la bestia.

El falso profeta, mientras está ocupado con sus elevadas ambiciones de impresionar a los católicos del mundo, será dejado de lado, por un tiempo, porque el anticristo entrará ahora en la escena mundial, como se predijo. Cuando escuchen los informes de los medios de comunicación sobre el nuevo, prometedor y hábil negociador de paz, sabrán quién es. Será un aliado muy cercano del falso profeta y no se hará ilusiones sobre quién es: el hijo de Satanás.

Recuerda que no importa lo aterrador que esto pueda ser, que Yo, Jesucristo, Soy el Rey. Ningún hombre, ningún enemigo, tiene más poder que Dios. Pero la batalla por las almas debe ser peleada, como fue predicho. Difundiendo Mi Palabra, Mis Mensajes y Mis Oraciones, me ayudarás a salvar las almas que necesito, para que Mi Nuevo Paraíso pueda llenarse con todos los hijos de Dios.

Confía siempre en Mí, tu Jesús, que te guiaré y protegeré durante esta abominación en la tierra. Te prometo que el período será corto.

Tu Jesús