Esta vida, en un abrir y cerrar de ojos, pasará a una Nueva Vida, un Nuevo Paraíso Renovado

Mi querida y amada hija, tantas personas en el mundo no son conscientes de su espiritualidad. Tan atrapadas en asuntos, concernientes a su vida diaria, sus trabajos, su papel como padres, su lucha por aprobar exámenes y educarse, que se olvidan de sus vidas después de que su tiempo en la tierra llegue a su fin.

Es justo que hagan lo mejor que puedan, en cuestiones de responsabilidad, para alimentarse y vestirse, pero cuando descuidan su bienestar espiritual, se están negando a sí mismos los mayores dones, que les esperan.

Muchos olvidan que Mi Padre puede quitar la vida en cualquier momento. Si las almas no están preparadas, sufrirán remordimientos y puede que no entren en el Cielo en el momento en que pasen de esta vida a la otra.

A quienes llevan una vida ajetreada les resulta difícil plantearse qué ocurrirá cuando este tiempo, que Dios les ha concedido, llegue a su fin. Para muchos, la muerte es aterradora y no desean pensar en ella. Y así, Me rechazan a Mí, su Jesús, su camino hacia el Reino de Mi Padre. Yo, Jesucristo, Soy el único camino para disponer de la vida eterna, una vida desconocida para vosotros.

Quiero decirles que a todos los hijos de Dios les espera una vida maravillosa. Esta vida es importante, porque es la forma en que vives la vida, que se te da en la tierra, lo que determinará tu futuro.

Nunca debes pensar en la muerte como el final. Por el contrario, piensa en ella como el comienzo de una vida nueva y maravillosa. El tiempo que pasas en la tierra es una prueba. Es una prueba y en muchos sentidos es un exilio. Nacidos pecadores, también morirán como pecadores. Pero serán aquellos pecadores que se amen los unos a los otros, que traten a los demás con amor y respeto y que vivan sus vidas a Mi Imagen, los que tendrán mucho que esperar.

Debido a Mi gran Compasión por todos los hijos de Dios, hago grandes excepciones por las almas que vagan, perdidas y confundidas. Persigo a las almas que no quieren tener nada que ver Conmigo y remuevo sus corazones, para que sientan compasión por los demás.

Muchos no se dan cuenta de cómo trabajo, dentro de sus corazones, pero hago esto para atraerlos hacia Mí. Para cada alma que Me llama, aunque no esté segura de Mi Existencia, Yo vengo corriendo. Yo respondo, instantáneamente, y escucho todas las intenciones. Soy un Dios Amoroso. No Me enojo fácilmente. Soy Paciente. Soy expectante. Soy Leal. Soy todo Misericordioso. Estoy esperando que todas las almas reconozcan Mi Llamada, porque pronto tendrán pocas dudas de Quién es la Voz que oyen, que les hace señas para que sientan el Amor de Dios.

Esta vida, en un abrir y cerrar de ojos, pasará a una nueva vida, un nuevo Paraíso renovado. Aunque este tiempo en la tierra puede estar lleno de pruebas, presiones, estrés, altibajos, no se puede comparar con la paz y la gloria de la vida, que espera a todos los que Me aman.

Tu Jesús