Madre de Dios: El ejército remanente de Cristo Triunfará

Mis amados hijos de Dios, Yo soy vuestra Madre celestial, la Madre de Misericordia, la Madre de Salvación. Sois mis hijos preciosos y os cubro a todos con mi velo de salvación, mientras vuestras almas cansadas luchan en el dolor.

Rezad, hijos míos, a mi Hijo, con plena fe y confianza en su Misericordia. Él nunca os defraudará. Mientras soportáis el dolor y la tristeza, porque conocéis la Verdad, y os sentís desgraciados, por la maldad que veis a vuestro alrededor, debéis estar en paz. Porque estáis rodeados del Amor de Dios, mi Padre, y sois bendecidos con las Gracias que mi Hijo os concede y esto enriquece vuestras almas.

No debes permitir que el miedo y la preocupación te distraigan del papel, que mi Hijo ha esculpido para ti. El ejército remanente de Cristo triunfará y traerá, a su paso, miles de millones de almas, que presentará ante el Trono de Dios.

Qué bendición se les ha dado. Aquellos de entre ustedes, que dirigirán y ayudarán a los Grupos de Oración de la Cruzada de mi Hijo, están salvando miles de millones de almas. Estas oraciones son como ninguna otra, ya que han sido dadas a la humanidad como un Regalo, con Gracias especiales unidas a ellas. Sin que ustedes lo sepan, las almas que ustedes ayudan a salvar son treinta veces más, cuando rezan estas oraciones. Os permiten confortar el Corazón de mi Hijo, aumentando y fortaleciendo en número las almas, que Él necesita para cumplir Su Plan de Salvación.

Gracias por responder a la súplica de mi Hijo desde el Cielo. Muchas Gracias te han sido dadas en las últimas dos semanas. Los frutos de estas Gracias se harán más claros para ti a medida que avanzas en el Camino de la Verdad, hacia la vida eterna.

Tu querida Madre

Madre de la Salvación