El aumento del odio, el asesinato y la falta de caridad es intenso y el pecado ha infestado la tierra como un reguero de pólvora

Mi muy amada hija, la furia de Satanás se derrama sobre la tierra mientras el Espíritu Santo aumenta Su Divina Presencia dentro de las almas de tantos, a través de ésta y otras Misiones, sancionadas por Mí.

El aumento del odio, el asesinato y la falta de caridad es intenso, y el pecado ha infestado la tierra como un reguero de pólvora.

El tiempo para la preparación del Gran Día de Mi Retorno debe comenzar ahora con gran cuidado. A medida que vosotros, Mis amados seguidores respondáis a Mi Llamada, Yo aumentaré vuestra fe y os multiplicaréis por todas partes.

Esta Misión es la culminación de todas las instrucciones dadas a la humanidad a través de Mi Padre, a todos los que vinieron antes que vosotros. ¿No te das cuenta de que los profetas, desde el principio, cuando describieron el Día del Señor, que esto se refiere a Mi Tiempo, el tiempo en el que cumpliré el pacto final?

Mi Plan es venir a daros la vida eterna que os prometí cuando os liberé de las cadenas del pecado, por Mi Muerte en la Cruz. A los que desconfiáis de Mí, sabed que jamás podría engañaros en una Misión como ésta. No os pediría que Me ayudarais a salvar almas, a combatir al maligno, ni os animaría a rezar, si no fuera Yo, vuestro Jesús, Quien os llama ahora.

Pobrecitos míos, vivís en un desierto que no es obra vuestra. Yo Soy vuestra única salida. A menos que Me sigáis, ahora, perderéis el tiempo vagando, perdiéndoos y distrayéndoos. Tu fe sólo puede mantenerse fuerte a través de los Santos Sacramentos. Mantén tu fe y sígueme. Es todo lo que te pido. Entonces reza por la salvación de las almas.

Nunca te condenaré por no aceptar estos, Mis Santos Mensajes. Pero nunca te perdonaré si blasfemas contra la Palabra de Dios, dada a ti por el Poder del Espíritu Santo. Si no crees en Mis Mensajes, entonces aléjate y continúa con tu devoción a Mí.

Mis queridos discípulos, os moveréis rápidamente para crear un gran ejército y una fuerte defensa contra los enemigos de Dios. A medida que esto aumente en fuerza, por favor animen a tantos de Mis siervos sagrados, como sea posible, para que les ayuden. Es importante que, por mucha resistencia que encuentren, sigan proporcionando la Misa diaria y el Sacramento de la Sagrada Comunión a los necesitados.

Tu Jesús