El poder de la muerte sobre la humanidad será finalmente derrotado

Mi querida y amada hija, el día que venga a reclamar Mi Herencia, prometida a Mí por Mi Padre, será repentino.

Mientras preparo a toda la humanidad para este gran acontecimiento, el día llegará inesperadamente. Se acerca el momento de que la bestia sea arrojada al abismo, y entonces las doce naciones disfrutarán de paz y unidad.

Durante este tiempo los santos en el Cielo, y todos aquellos que murieron en Mi Favor, serán resucitados con los justos que sobrevivirán a la Tribulación. Todos serán resucitados y se les dará el Don de cuerpos perfectos, que superarán la muerte conocida por la humanidad desde el pecado de Adán. Ellos disfrutarán de paz y prosperidad bajo Mi Reino Espiritual hasta que Mi Reino sea entregado a Mi Padre.

Esta será la primera resurrección y será seguida por un reinado de mil años de perfecta armonía de acuerdo a la Divina Voluntad de Mi Padre.

Durante este tiempo, los pecadores que Me negaron sufrirán. La Segunda Resurrección no es conocida por la humanidad, ni los detalles han sido revelados a nadie más que a los profetas Daniel y Juan el Evangelista.

Estos secretos serán revelados, a su debido tiempo, pues no son para que los conozcas ahora.

El Poder de Dios se manifestará cuando la batalla para salvar almas tenga éxito.El poder de la muerte sobre la humanidad será derrotado finalmente. Esta es Mi Promesa. Cumpliré las profecías establecidas por Mi Padre.

Aquellos entre ustedes que están confundidos, no teman. Todo está ahora en Mis Santas Manos, pero estén seguros que todo lo que importa es el perdón de los pecados. Esto será cuando todos ustedes Me pidan el Regalo de la Redención. Es así de simple.

Tu amor por Mí te dará el Don de la Vida. La muerte, tal y como la conoces, no tendrá control sobre ti de nuevo. Vuestro futuro es algo que debéis acoger con alegría en vuestros corazones porque es el mayor Regalo de Dios y sólo aquellas almas que lo merezcan serán legadas con tal riqueza. Estad en paz. Confiad en Mí. Amadme. Eso es todo lo que importa.

Tu Jesús