Tengo un Mensaje, que debo impartir para el Pueblo Americano

Mi muy querida hija, tengo un Mensaje, que debo impartir para el pueblo Americano.

Mis queridos seguidores, deben prestar atención a Mi Santa Palabra ahora y escuchar.

Ustedes están enfrentando mucha persecución debido a los pecados de sus compatriotas y de aquellos que están en control de sus leyes de aborto. Este mayor pecado, del que sois culpables millones de veces, ha cortado Mi Corazón como si una espada lo atravesara varias veces.

Tus pecados de inmoralidad y tu amor por la riqueza material Me ofenden profundamente. No tenéis lealtad hacia Mí en la forma en que se espera de vosotros. Aquellos de vosotros que os habéis alejado de la Verdad debéis invocarme para que Yo abra vuestros ojos.

Amo a todos los hijos de Dios en los Estados Unidos de América, pero temo que el pecado ha abierto una brecha tan ancha que muchos de ustedes caerán en un abismo de desesperación, a menos que acepten la Existencia de Dios.

Es importante que recéis mucho ya que el poder de Satanás se ha infiltrado en muchas de vuestras leyes. Las leyes, más de las cuales van a ser introducidas por esos ateos entre ustedes, serán aborrecibles a los Ojos de Mi Padre.

Cómo lloro por el engaño con el que se os presenta. Mis pobres siervos sagrados entre vosotros serán aplastados como insectos bajo los pies de aquellos dirigentes que me niegan a Mí, vuestro Jesús.

Este es un tiempo en el que la oración debe ser tu meta diaria para que tu nación pueda ser salvada e incluida entre mis doce naciones en el Nuevo Paraíso.

He aquí una Oración de Cruzada (85) para salvar a los Estados Unidos de América de la mano del engañador

Oh querido Jesús, cubre nuestra nación con Tu más preciosa protección. Perdona nuestros pecados contra los Mandamientos de Dios. Ayuda al pueblo americano a volver a Dios. Abre sus mentes al Verdadero Camino del Señor.

Abre sus corazones endurecidos, para que acojan Tu Mano de Misericordia. Ayuda a esta nación a levantarse contra las blasfemias, que pueden ser infligidas sobre nosotros para forzarnos a negar Tu Presencia.

Te suplicamos, Jesús, que nos salves, nos protejas de todo mal y abraces a nuestro pueblo en tu Sagrado Corazón. Amén.

Id, pueblo Mío, y nunca, tengáis miedo de demostrar vuestro amor por Mí; o de negar vuestro Cristianismo.

Tu Jesús