Mi querida y amada hija, es con amor que pido a todos los hijos de Dios que se preparen para presenciar las señales que pronto serán reveladas desde el Cielo.
Los signos se presentarán al mundo de diferentes maneras para despertar a los hijos de Dios. Muchos tratarán de negar estas señales y descartarlas como supersticiosas y en la imaginación de los creyentes.
Para aquellos que presencien los signos debéis saber que os ayudarán a preparar vuestras almas. Porque cuando hayáis preparado vuestras almas y hayáis pedido el perdón de vuestros pecados, vuestro sufrimiento, después de La Advertencia, será mínimo.
Acepta estos signos, estos milagros, como un Regalo del Cielo.
No luchéis contra ellos ni los ignoréis porque son la prueba de Mi Promesa de prepararos a todos antes de Mi Segunda Venida.
Ve ahora y ten fe.
La confianza es el acto de lealtad más importante para Mí, tu Jesús.
