Madre de Dios: Ha sido predicho, hija mía, que en estos tiempos que ahora vives se endurecerán los corazones de la humanidad.

Hija mía, qué rápido idolatra la humanidad a los falsos reyes, a los falsos dioses.

Muchas personas en el mundo de hoy no piensan nada de abrazar falsos ídolos y luego no tienen culpa en sus corazones cuando rechazan al único Dios verdadero.

Se ha predicho, hija mía, que en estos tiempos que ahora vives se endurecerán los corazones de la humanidad.

Rechazarán incluso a su propia familia en busca del placer.

Rechazarán a los que están en la pobreza y a los que pasan hambre mientras practican todo tipo de egoísmo y cometen el pecado de la gula.

Estos días han llegado, niños. Mientras la raza humana vaga desamparada, en confusión, donde nada satisface, se aferrarán a cualquier cosa que crean que llenará el vacío. Este vacío existe porque no siguen la Verdad ni rinden lealtad a mi amado Hijo.

No sólo idolatran a dioses falsos, sino que rinden pleitesía a esas pobres almas que promueven el pecado como si no tuviera importancia.

Luego, cuando se les presentan mentiras sobre mi Hijo en el mundo actual, se apresuran a aceptar tales falsedades.

Se acepta ridiculizar a mi Hijo y, sin embargo, cuando se critican otras doctrinas que no contienen la Verdad, la gente se encoge de miedo. No temen a mi Hijo.

No temen al único Dios Verdadero porque no lo aman. Sus corazones están cerrados.

Siguen por un camino que no les aporta ningún consuelo. Por el contrario, este camino les deja insatisfechos y vacíos.

Cómo lloro cuando veo su confusión. Cómo lloro por mi Hijo, a quien tanto hirieron con su desprecio. Aquel que sufrió tanto por ellos y que murió de la manera más agonizante. Sin embargo, todavía no comprenden el significado de su muerte en la cruz.

Sólo cuando una persona acepta a Jesús, el Cristo, el Verdadero Mesías, encontrará la paz.

Pronto mi Hijo les presentará las pruebas que exigen. Cuando se les muestre la prueba tendrán que tomar la decisión final.

Ellos escogerán a mi Hijo y la Verdad o aceptarán las mentiras que les da el engañador.

Rezad niños para que los corazones se abran y que el amor a mi Hijo permita a todos los hijos de Dios aceptar Su Mano de Misericordia.

Tu querida Madre

Madre de la Salvación