jueves, 23 agosto 2012 15:15
el amor salva del infiernola AdvertenciaNuevo Paraísooración por los pecadoressobre esta MisiónEl amor de DiosDivina MisericordiaMi queridísima hija, han sido pocas las veces que la Santísima Trinidad se ha comunicado a la humanidad de esta manera y la primera vez que yo, tu Padre, he sancionado una Misión de este tipo.
Mis hijos, muchos de los cuales no se dan cuenta de la importancia de esta Intervención Divina, comprenderán pronto por qué es necesaria.
Si la Segunda Venida de Mi Amado Hijo ocurriera, sin aviso, Mis preciosos hijos nunca entrarían por las puertas de Mi Nuevo Paraíso.
Nunca habrían podido preparar sus almas y no serían aptos para ser admitidos en la Nueva Era de Paz.
Se trata de una comunicación a la que el mundo tendrá dificultades para responder.
Tan oscura es la nube que cubre los corazones del hombre que pocas almas podrán ver la Luz de Mi Divina Promesa.
Las fuerzas del mal, siempre presentes en el mundo, impiden que Mis hijos se acerquen a Mí.
Mi determinación de acercar a Mi familia y unirla a Mi Seno es feroz.
Que nadie deje de comprender que facilitaré la rápida conversión de la humanidad, cueste lo que cueste.
Permitiendo que el libre albedrío de todos Mis hijos permanezca intacto, los milagros que ordenaré, volverán sus corazones del revés.
Esta es Mi Promesa mientras os llamo a cada uno de vosotros, queridos hijitos Míos.
Yo, tu Amado Padre, anhelo tomarte, reunirte y estrecharte contra Mi Corazón y llevarte a un lugar seguro.
Tan pocos de ustedes conocen las profundidades de Mi Amor. Una vez que experimentéis el amor por Mí, vuestro Padre Eterno, nunca más podréis cortar vuestro vínculo Conmigo.
Quiero darte consuelo.
Deseo hacerte saber que Mi Amor por ti significa que, a través de Mi Hijo Jesucristo, se mostrará una gran Misericordia incluso a aquellos con corazones de piedra y a aquellos con almas tan negras que sólo un milagro puede salvarlos.
A los que me aman les digo esto. Tu amor por Mí, tu Padre, te será devuelto en abundancia. Vuestro amor por Mi Hijo Precioso será recompensado en que Yo concederé inmunidad de las Puertas del Infierno a aquellas almas por las que oréis.
Nada es imposible.
Mi Amor es infinito.
Confía en mí.
Confía en Mi Hijo.
Cuando lo hagas concederé grandes gracias para la Salvación de la humanidad.
Tu amado Padre
Dios Altísimo