martes, 17 abril 2012 18:30
consolaciónuna llamada a difundir Mensajesa los que son infelicesa todas las religionesoración adicionaloración personalposesión diabólicasatanismoa los que se sienten insatisfechosa no amadoa los que no conocen el sentido de la vidaa los incrédulostáctica de satanáspotenciaMandamientos de DiosLa protección de DiosMi amadísima hija, que sepas que Mis Mensajes dados a ti, son para el mundo entero.
Se entregan a todas las religiones y credos, incluidos los que no creen en la Existencia de Dios, Padre Eterno, Creador del mundo entero.
Hijos, debéis saber que porque se os ha dado la Verdad del Dios Trino, la Santísima Trinidad que está formada por el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, tenéis la responsabilidad de proclamar Mi Santa Palabra al mundo entero.
Tanto si crees que te hablo a través de estos Mensajes como si no, debes ayudar a esas pobres almas que necesitan Mi protección, para que puedan salvarse.
Muchos se preguntan por qué estos Mensajes se refieren a Satanso muchas veces. Mi respuesta es la siguiente.
Satanás y sus ángeles caídos vagan por la Tierra buscando infestar a los seres humanos.
Los atacan a través de los sentidos, principalmente para incitarlos a cometer pecados de la carne.
Ponen pensamientos en sus mentes para que cometan atrocidades, que ofenden a Mi Padre.
En el caso de las almas, ya en pecado, pueden poseer el cuerpo. Cuando esto sucede estas pobres almas poseídas crean estragos a su alrededor.
Si ocupan posiciones de poder, pueden infligir terribles injusticias entre aquellos a quienes gobiernan.
Introducirán leyes, que desafían los Diez Mandamientos, establecidos por Dios Padre.
En otros casos causarán gran angustia en la vida de las personas.
La negatividad es causada por Satanás y sus ángeles demonios. Esto no viene de Dios.
Sólo la paz y el amor pueden venir de Dios.
Para todos aquellos que quieren librar sus vidas de pensamientos y sentimientos negativos, todo lo que se requiere, es devoción a Mí, su amado, Jesucristo.
La oración, una simple conversación, es suficiente. Con tus propias palabras pídeme que te ayude.
Dicho de corazón, responderé inmediatamente y te ayudaré a acercarte a Mi Sagrado Corazón.
Por favor, hijos, dejad que Yo os abrace y os dé el consuelo que anheláis en un mundo lleno de infelicidad, injusticia, crueldad y odio.
Yo Soy tu salvavidas. Sólo Yo puedo ayudarte. Por favor, llámame en esta Oración de Cruzada (45)
"Oh Jesús, sé muy poco de Ti.
Pero, por favor, ayúdame a abrir mi corazón para permitirte entrar en mi alma, para que puedas sanarme, consolarme y llenarme de Tu paz.
Ayúdame a sentir alegría, a vencer todos los pensamientos negativos y a aprender el camino que me haga comprender cómo complacerte, para que pueda entrar en Tu Nuevo Paraíso, donde podré vivir una vida de amor, alegría y maravilla contigo, por los siglos de los siglos. Amén".
Os amo a todos, queridos hijos, no importa de qué credo seáis, no importa cuánto hayáis pecado, causado daño o perjuicio a los demás.
Sólo yo puedo cambiar tu forma de vivir.
La única manera de liberarte de la vida difícil que llevas, es llamarme, para que pueda ayudarte.
Tu amado Jesús