miércoles, 12 enero 2011 15:00
vida temporal en la tierrael Juicio Finaloración por la fequé es el wariningoración personala los que no creen en los Mensajesla Advertenciaa los incrédulosNuevo Paraísosobre esta MisiónEl amor de DiosHija mía, Mi Mensaje de ayer fue duro. Muchos al leerlo dirán: "así no habla el Señor", pero ¿cómo lo saben? Es debido al sufrimiento que están soportando Mis amados hijos, a manos de otros, que debo hablar. Hablo por Mi Divina Misericordia, para ayudar a salvarlos, hijos Míos, para que podamos estar unidos como una Sagrada Familia en el Nuevo Paraíso. No quiero perder ni una sola alma a manos del engañador. Es importante que Mi Voz sea escuchada.
A los no creyentes les resulta tan difícil
Comprendo que a muchos de Mis hijos, especialmente a los no creyentes, les resulta muy difícil creer en la otra vida. Están tan condicionados, por los asuntos mundanos, que en su lucha por sobrevivir, han descuidado su espiritualidad hasta tal punto que no creen en absoluto que haya otra vida. Ahora necesitan reflexionar. Creen que todo acaba después de la muerte y que el único mundo del que deben preocuparse es en el que viven ahora. Cómo me angustian estas almas descarriadas. Si tan sólo pudieran experimentar una vislumbre de lo que el Paraíso provee, pasarían sus días en oración y adoración a Mí, y a Mi Padre Eterno, en alabanza y agradecimiento.
Este Nuevo Mundo que les he prometido es una realidad. Alabados sean los creyentes que nunca han olvidado este hecho y que siguen rezándome cada día. Cómo amo a Mis seguidores; pero cómo sufro también por ellos. Estos devotos seguidores hacen todo lo que pueden para convencer a los demás de Mi Existencia. Luego se ríen de ellos y los desprecian en Mi nombre. Cómo esto rompe Mi Corazón.
Cómo suspiran los difuntos por los que se quedan sin fe
¡Cómo suspiran vuestros seres queridos por vosotros en el otro lado, no creyentes! Aquellos de vosotros, cuyos seres queridos están en paz en el Reino de Mi Padre, rezan constantemente para interceder por vosotros. De lo que no os dais cuenta es de esto. Si te tomas el tiempo para hablar Conmigo en privado - con tus propias palabras - y Me pides guía, incluso si tu fe es tibia, entonces responderé. Y sabrás que he respondido. Diríjanse a Mí ahora niños. Con tus propias palabras y pídeme que restaure tu fe.
Considerad Mis Enseñanzas a través de estos Mensajes y a través de la Biblia y recordad de qué manera debéis vivir vuestras vidas. Yo, por Mi Misericordia, os revelaré muy pronto vuestros agravios contra Mis Enseñanzas, y cada pecado y ofensa que hayáis cometido a lo largo de vuestra vida.
No es el Día del Juicio Final, pero es una muestra de cómo será
Este es un Acto de Misericordia de Mi parte. Verás tus pecados y comprenderás inmediatamente cómo me parecen a Mí. Al instante, comprenderéis claramente lo ofensivos que son y lo equivocados que están. Esta es su oportunidad, hijos, para arrepentirse. Este no es el Día del Juicio, sino una muestra de lo que será.
Por misericordia se te está dando el mayor regalo de todos antes del Día del Juicio - la oportunidad de arrepentirte y cambiar tu vida antes del día final - el momento en que yo regrese a esta Tierra. Vengo, como sabéis, no como un Salvador entonces, sino como un Juez Justo. Ese tiempo está ahora cerca, hijos Míos. No temáis. Os amo a todos. Ustedes están en Mi Corazón. Permitidme entrar en el vuestro ahora, y dejadme guiaros al Reino de Mi Padre. Nunca teman a la muerte. La muerte será simplemente una puerta hacia una nueva y hermosa vida de eternidad dichosa, llena de amor, paz y felicidad.
La vida en la Tierra: sólo un pasaje en el tiempo
Tu vida en la Tierra es simplemente un paso en el tiempo. Puede estar llena de amor, alegría, dolor, rechazo, miedo, ira, desesperación, frustración y tristeza. Pero sólo cuando te vuelvas a Mí, tu dolor se aliviará. Bienaventurados los que sufren y especialmente en Mi Nombre, porque seréis glorificados en el Reino de Mi Padre. Bienaventurados también los que vuelven a Mí, porque habrá gran regocijo en el Cielo.
Seréis bienvenidos a Mi Nuevo Paraíso. Rezad por vuestras almas y las de vuestras familias, ahora. El Aviso tendrá lugar pronto. Entonces conoceréis la Verdad. Entonces tendréis la oportunidad de redimiros ante Mis Ojos.
Os amo a todos. Me regocijo porque sé que muchos más de Mis hijos ahora volverán a Mí y a Dios el Padre Eterno, ya que el tiempo del fin de los tiempos se acerca ahora. Estad preparados.
Tu amoroso Salvador
Jesucristo