Celebrar la Navidad

Mi amada hija, ¿por qué dudas? ¿No sabes que estás siendo guiada diariamente? Sabes, en tu corazón, seguramente, que todo lo que necesitas hacer es sentarte, abrir tu corazón y, en breve, escucharás Mi Mensaje. Confía en Mí. Entrégate. Cree que cuando Me pases por encima tus miedos, preocupaciones, inquietudes y preguntas, Yo te los quitaré y responderé en consecuencia. Ahora debes poner el tiempo a un lado para prestar atención a estos Mensajes más urgentes para toda la humanidad. No dudes en seguir adelante con este Trabajo Sagrado.

Ahora presta atención a esto, Mi amada hija. Cuando los cristianos de todo el mundo se vuelvan para rendir homenaje a Mi Nacimiento en Belén, muchos simplemente rendirán respeto, sin verdadero amor en sus corazones. Muchos, sin embargo, se acercarán a Mi Corazón. Otros simplemente asentirán, sonreirán y hablarán brevemente sobre el significado de este momento tan importante en la celebración del mayor Regalo jamás concedido a los hijos de Mi Padre desde el principio. Sin embargo, cuando Mis hijos, Mis devotos seguidores, celebran la Navidad se distraen con la pompa y la ceremonia asociadas con los bienes mundanos.

¿Cuántos cristianos explican a sus hijos el significado de Mi nacimiento? ¿Cuántos recuerdan la humildad mostrada por Mi amada Madre y su santísimo esposo San José? ¿Cuántos comprenden que Me hice hombre para salvar al género humano del camino del Infierno? Fue este simple Mensaje el que se distorsionó a través de los siglos y se camufló con ostentación. Sin embargo, ha sido reconocido por los cristianos devotos como un tiempo para reflexionar sobre su lealtad a Mí, su Salvador. Por favor, hijos, os pido que utilicéis esta Fiesta para rezar por todos aquellos que en el mundo necesitan despertar al hecho de que tienen una herencia. Un lugar especial ha sido reservado para cada uno de ellos, en el Reino de Mi Padre, si deciden aceptarlo.

Tiempo de Gran Advertencia decidido
Tan atrapados están Mis hijos, con las noticias, cada minuto del día, que aunque puedan afectar sus vidas, no tienen ninguna consecuencia en la vida eterna. Hijos, es tiempo de que todos ustedes examinen su conciencia, ahora, antes de la Gran Advertencia, que precede a Mi Segunda Venida. Utilicen la oración con sus propias y sencillas palabras para pedir la guía Divina.

El momento de la Gran Advertencia está decidido. Estad alerta. Mantente en guardia.

Tu Divino Salvador y Justo Juez
Jesucristo