sábado, 7 enero 2012 15:40
Volume 2Huerto de Getsemanía los creyentessufrimiento de Diosamor a Diosa los enemigos de la Misiónpedir perdóna los que no creen en los Mensajesluchar contra esta Misiónhumildadamor a los vecinosno juzguescalumniaorgulloodiobatalla entre cristianosDivina MisericordiaLa estancia de Jesús en la TierraMi muy querida y amada hija, mientras Mis seguidores continúan luchando entre ellos en cuanto a la autenticidad de estos, Mis Santos Mensajes al mundo, más y más almas continúan siendo separadas de Mí.
A los que decís conocerme, estad seguros de que vuestro amor por Mí debe ser probado.
No basta con decir que me amas. Debes amar primero a tu prójimo. ¿Cómo se ama al prójimo? Tratándolo con amor y respeto, por mucho que te ofenda.
Ay de aquellos de vosotros que calumniáis a otro en Mi Nombre. Estáis perdidos para Mí. Sin humildad en su corazón, ustedes, cuando juzgan y maldicen a otro en Mi Nombre, escupen en Mi Rostro.
Recuerda que no Me representas cuando calumnias y muestras odio público hacia los demás.
Sin embargo, muchos de los que se proyectan como santos apóstoles Míos, caen en esta trampa, tendida para ellos por Satanás, con el fin de hacerles tropezar.
Vete te digo. Reza por el perdón, mucho mejor que dediques más tiempo a rezar por la salvación de tus hermanos y hermanas.
Oh cómo deseo que esos seguidores, que dicen venir en Mi Nombre, se comporten de la manera que les he enseñado. Cómo hieren a esas pobres almas que hacen todo lo posible por permanecer humildes ante Mis Ojos.
Hay una gran necesidad de discernimiento con respecto a estos Santos Mensajes de Mis Labios Divinos, los últimos Mensajes de este tipo, en estos tiempos finales.
Nunca crees tu propia opinión basada en una comprensión errónea de Quién Soy Yo y de Mis Enseñanzas.
Yo Soy, ante todo, un Dios de Misericordia antes de venir como Juez.
Os amo a todos, pero, sufro hoy el mismo dolor que experimenté durante Mi tiempo en el Huerto de Getsemaní. Nunca descansaré hasta que os salve del maligno.
Cualquier hombre que diga que Yo no sufro no Me conoce. Cualquier hombre que piense que se le ha dado autoridad para juzgar a otros en Mi Nombre, no Me ama de verdad. En cambio, se ama a sí mismo y está lleno de orgullo.
Cualquier hombre que mueva su dedo hacia los demás, con el fin de intimidarlos para que crean en Mí, también ha malinterpretado Mis Enseñanzas de amor, humildad y paciencia.
Muchos cristianos bienintencionados creen que su papel es analizar y reevaluar Mis Enseñanzas. Sin embargo, gran parte de su análisis se basa en el razonamiento humano y lógico, que es de poca sustancia en Mi Reino.
Cuando te insto a que te hagas pequeño a Mis Ojos quiero decir como un niño que no cuestiona. Quiero decir como un niño que confía completamente en su padre sin miedo en su corazón.
Hasta que no os hagáis pequeños a Mis Ojos no seréis aptos para hablar en Mi Nombre.
Cuando encuentres la humildad que busco, sólo entonces podrás ayudarme a salvar almas.
Tu profesor
Redentor de la Humanidad
Jesucristo