Mi queridísima hija, de Mí viene la Vida Verdadera, la única vida que el hombre necesitará de aquí a la eternidad.
Hijos, debéis saber que esta terrible confusión que estáis viendo a vuestro alrededor no durará mucho.
Dios, Mi Padre Eterno, no permitirá que Sus preciosos hijos sufran mucho más. Vosotros, hijos Míos, sois las víctimas de la obra del engañador. Aquel que controla el grupo global se está debilitando. Sus poderes están siendo desbaratados a través del Poder de Mi Padre. Este grupo, que deliberadamente destruyó vuestros sistemas bancarios para hacer mendigos de vosotros, se desmoronará. No debéis preocuparos porque la Mano de Mi Padre caerá sobre sus malvados caminos.
Reza para que todas esas almas engañadas que acatan servilmente la maldad, que está en el corazón mismo de este grupo, se conviertan durante La Advertencia.
Nunca debéis perder la esperanza, hijos. Será por vuestro amor a Dios Altísimo, que volveréis al redil de vuestra familia. La Santísima Trinidad es vuestra casa, hijos. Aquellos de vosotros que aceptéis este hecho, realizado a través de la conversión, heredaréis la gloriosa Era del Paraíso en la Tierra.
Confía siempre en Mí. Ofréceme tus preocupaciones, problemas y miedos. Permíteme aliviar tu dolor y sufrimiento. No pasará mucho tiempo cuando el mundo encuentre alivio a los dolorosos dolores de parto que soportas en estos tiempos.
Nunca pierdas la esperanza. Confía en Mí. Rezad para que Mis gracias os hagan más fuertes. Pongan su cabeza sobre Mis Hombros y permitan que Mi paz envuelva sus almas. Sólo entonces comprenderéis la Verdad de Mi gloriosa promesa de vida eterna.
