Mi querida y amada hija, el creciente número de pruebas que estás sufriendo ahora en Mi nombre no es por casualidad. Mientras Satanás continúa atormentándote, sólo piensa en las almas que estás salvando a través de este sufrimiento. Trata de elevarte por encima de estas dificultades y mantenme en tus pensamientos todo el tiempo. Reza a Mi amada Madre para que te proteja y recita el Santo Rosario tan a menudo como puedas.
Es importante que todos Mis seguidores pidan protección contra el engañador que espera cada oportunidad para crear dudas en sus mentes.
Él y sus demonios están en todas partes. Usarán todas las tácticas posibles para causar estragos en sus vidas. Sepan que cuando esto suceda que han sido tocados por Mis Enseñanzas y que ahora llevan Mi Cruz.
No temáis, hijos, porque todos sois capaces de salir de este desierto gracias a la fuerza que ahora os concedo a todos y cada uno de vosotros, Mi ejército. Triunfaréis sobre el maligno y su maldad. Cuanto más oréis al unísono, mayor será el muro de la armadura. Ninguno de Mis hijos que sufren persecución como resultado directo de trabajar para Mi puede ser tocado por el maligno.
Vosotros, hijos Míos, sois bienaventurados si sufrís en Mi Nombre aunque os cueste entenderlo.
Ignoren esas burlas. Dad la espalda. No reaccionen. Permanezcan en silencio. Rezad para tener fuerza. Yo estoy con vosotros.
