Explicar el horror del Infierno a quienes no ven la existencia de Satanás

Mi querida y amada hija, ¿por qué persiste el hombre en negar la existencia del Infierno?

Muchos de Mis hijos, que se consideran modernos en su perspectiva, públicamente niegan la existencia del Infierno, cuando proclaman su creencia en Dios el Padre Eterno. Ellos engañan a Mis hijos cuando usan la excusa de que Dios es Siempre Misericordioso. Convenciendo a Mis hijos de que todos irán al Cielo, ellos se vuelven involuntariamente responsables de aquellos que siguen su doctrina defectuosa.

Satanás existe y, por tanto, también el Infierno. El Infierno es un lugar donde Satanás lleva a aquellas almas que le muestran lealtad en la Tierra. Son las almas que dejan de lado todo pensamiento de Dios y promueven la aceptación de actos malvados en el mundo. En algunos casos, las personas pueden incluso vender sus almas a Satanás, a cambio de una vida de riqueza, celebridad y poder. Muchos en la industria de la música han hecho esto a lo largo de los años. Poco se piensa en la forma en que se hace su lealtad, muy a menudo a través de inauguraciones de grupos llevadas a cabo mediante prácticas ocultas.

En el otro lado están los que viven lo que consideran simplemente vidas despreocupadas y llenas de diversión, en las que anhelan constantemente la autogratificación. Son sólo algunas de las almas que, al llegar a las puertas del Infierno, se sorprenden y sacuden la cabeza con incredulidad ante el destino que les espera. No pueden aceptar que este terror al que se enfrentan es obra suya. Abusaron de la libertad que se les dio en la Tierra en favor de todo lo que ofende a Dios.

Hijos míos, por favor, explicad el horror del Infierno a aquellos que están ciegos a la existencia de Satanás. No importa si se ríen y os insultan. Es vuestro deber advertirles del aterrador destino que aguarda a cualquier pobre alma que acabe allí.

Ateos, quienes en su lecho de muerte, creen que su sufrimiento terminará en su último aliento, escúchenme ahora. Para aquellos de ustedes que niegan la Existencia de Dios en esta Tierra, aunque la Verdad les ha sido revelada durante su vida, su sufrimiento en los fuegos del Infierno será sólo el comienzo de la condenación eterna. Vosotros, Mis pobres almas que cometéis pecados graves por vuestra propia voluntad, Me rechazáis. En lugar de ello, elegisteis a Satanás. Él os espera después de la muerte. Yo no estaré en ninguna parte. Para entonces será demasiado tarde para mostraros Mi Misericordia.

Rezad, rezad, todos vosotros, para que juntos podamos salvar estas almas. No debemos permitir que Satanás robe sus almas. Ayudadme a salvarlas mientras aún vivan en la Tierra.

Tu amado Jesús