Mis Mensajes provocarán lágrimas de conversión

Mi querida y amada hija, nunca debes olvidar que aquellos que hablan en Mi Nombre serán burlados, se reirán de ellos y quedarán en ridículo. Esta es la cruz de la que hablo. Nunca te desilusiones cuando esto suceda.

Muchos desafían ahora Mi Sagrada Palabra. Algunas toman la forma de preguntas genuinas, que provienen de un amor por Mí, mientras que otras están diseñadas para hacer que Mi Palabra parezca tonta y un sinsentido. Mis hijos deben aceptar que ahora aumentaré Mis comunicaciones a todos ustedes debido a la falta de tiempo. No importa que Mi Palabra sea desafiada, en lugar de eso estén alegres, porque ustedes saben que es cuando Yo me comunico a Mis hijos de esta manera que los obstáculos se presentarán. Si al leer Mis Mensajes Mis hijos sienten lágrimas, entonces sabrán que estas son las lágrimas de la conversión - un Regalo para todos y cada uno de ustedes a través del Poder del Espíritu Santo.

Muchos de Mis hijos se sienten confundidos porque cuando Mi Palabra es dada al mundo de esta manera puedo trastornar su rutina normal. Mi Palabra no traerá felicidad a todas las almas, porque algunas veces la Verdad puede ser aterradora. Si primero se sientan y permiten que Mi paz inunde sus almas sometiéndose a Mi Santa Voluntad, experimentarán verdadera satisfacción. Confíen en Mí, hijos. No Me bloqueen. Escuchen cuidadosamente lo que Yo digo y Yo los llevaré en Mi viaje a la salvación eterna.

Recuerde, Dios Padre está ahora a cargo de Su Reino, el cual ningún hombre puede derribar. Cualquier intento de hacerlo resultará en fracaso. Como los pecadores continúan insultándome a Mí y a Mi Padre Eterno, Su Mano estará lista para caer rápidamente. Debido a La Advertencia, Él se retendrá hasta que la conversión haya sido alcanzada. Mientras tanto, todos aquellos que no aceptan la Verdad, deben saber que tienen poco tiempo ahora para preparar sus almas.

Rezad por todos y cada uno de vosotros para que se salven las almas.

Tu amoroso Salvador

Jesucristo

Rey de la Humanidad