Enoc y Elías no estarán presentes en forma humana

Mi muy querida y amada hija, serán los Católicos Romanos y los Judíos quienes enfrentarán la mayor oposición en los tiempos venideros. Sufrirán discriminación, oposición y odio a medida que la apostasía estrangule a la humanidad. Sus voces serán silenciadas a medida que las falsedades devoren las mentes de los hijos de Dios cuando el maligno engañe al mundo para que rechace la Palabra de Dios.

Estos dos testigos continuarán proclamando la Verdad a través de aquellos de entre ellos que sean lo suficientemente fuertes como para propagar el Fuego del Espíritu Santo hasta que el Gran Día del Señor descienda sobre la humanidad. Los espíritus de Enoc y Elías inundarán sus almas y causarán indignación cuando den testimonio de Dios, la Verdad y la Vida, que miles de millones rechazarán. Como fue predicho, estos dos testigos serán opuestos y combatidos pero ay del hombre que intente destruirlos porque Dios castigará a Sus enemigos para permitir que estos dos mantengan viva la llama de Su Amor en un mundo, que será cubierto con la oscuridad de la apostasía.

Enoch y Elijah no estaran presentes en forma humana pero sepan esto. Estarán presentes en el espíritu de estos dos testigos y será a través de su sufrimiento que Dios redimirá a aquellos que están ciegos a la Verdad.

Nunca temas a la Verdad, teme solo a aquellos que están llenos de tal odio hacia Mí, Jesucristo, que se rebajarán a cualquier acto malvado para mantener a estos dos testigos en silencio. Pero, ellos no tendrán ningún impacto porque el Fuego del Espíritu Santo se derramará de sus bocas como una espada y cortará los corazones de aquellos que están en la mayor necesidad de la Misericordia de Dios. Entonces, cuando llegue el momento, estas dos religiones serán prohibidas y aquellos que se atrevan a practicarlas abiertamente serán acusados de cometer un crimen. Quemados hasta los cimientos, los Templos se convertirán en montones de cenizas y el mundo se deleitará con la destrucción de los Fieles de Dios y celebrará su desaparición.

Después de eso, el sonido de la Voz de Dios se oirá en todos los rincones del mundo y de las cenizas surgirá el Nuevo Comienzo, la Nueva Jerusalén un nuevo mundo puro sin pecado.

Tu Jesús