Madre de la Salvación: A los ángeles de Dios se les puede pedir que recen por ti pero nunca que te concedan poderes

Mis queridos hijos, nunca debéis rezar a los ángeles de Dios, porque ellos son Sus siervos y sólo se esfuerzan por dar Gloria a Dios y hacer Su Santísima Voluntad. La oración es un acto de adoración y cuando llamáis a los ángeles de Dios, dentro de Su Jerarquía Celestial, debe ser siempre con la intención de pedirles que recen por vosotros. Si tratas de comunicarte con la Jerarquía Celestial de Ángeles, entonces debe ser sólo para pedir su asistencia y guía para que puedas hacer la Santísima Voluntad de Dios.

Para aquellos de ustedes que creen que recibirán poderes de los Ángeles de Dios, entonces están equivocados. El poder dado a los ángeles sólo puede venir de Dios y nunca debes usarlos como un sustituto de rezarle a Él. Muchas almas tratan de comunicarse con los ángeles hoy en día por razones egoístas y para obtener poderes que no tienen nada que ver con Dios. Una obsesión con los ángeles puede llevar a un terrible descontento porque esto puede atraer al espíritu del mal si no se tiene cuidado.

Cuando invoques a los ángeles de Dios para que te ayuden, siempre debes bendecirte primero con Agua Bendita y luego pedirles ayuda, en el nombre de Jesucristo. Si no haces esto y usas cualquier objeto, que no este asociado con el Cristianismo, cuando pides la ayuda de los angeles, entonces esto podria invitar al espiritu del mal a tu vida. Una vez que esto suceda te resultará casi imposible erradicarlo.

Una pre-ocupación con la comunicación con los ángeles puede conducir a incursionar en el ocultismo. Una vez que esto suceda, atraerás a aquellos ángeles que fueron expulsados del Cielo por Mi Padre Celestial. Ellos ahora vagan por la tierra en cientos de miles, buscando un hogar. Las almas que se abren a su influencia pueden enredarse rápidamente en un mundo espiritual que no es de Dios. Una vez que abraces el inframundo no tendrás paz. Estos ángeles caídos te atraerán a una red de engaños. Primero sentiras una sensacion de esperanza y luego la creencia de que puedes controlar todos los aspectos de tu vida, con la ayuda de tales angeles. Con el tiempo, creerás erróneamente que tienes pleno control de tu propio destino. Toda falsa noción de paz llenará vuestras mentes pero, poco después, sentiréis una terrible desdicha.

Juguetear con tales espíritus que crees que son ángeles de Dios, pero que no pertenecen a Su Reino, te llevará a involucrarte con el ocultismo, que te cegará a la Verdad y destruirá tu alma.

Dios no da permiso a sus ángeles para que te hagan regalos, porque éstos sólo pueden venir de Él. A los Ángeles de Dios se les puede pedir que oren por ti, pero nunca que te concedan bienes mundanos o poderes espirituales. Cuando idolatras a los ángeles y buscas estas cosas eres culpable de romper el Primer Mandamiento de Dios.

Tu querida Madre

Madre de la Salvación