Mi muy querida hija, la oración y la devoción a Mí es como el agua que se le da a un hombre sediento. Cuando te falta agua tu sed continuará de modo que eventualmente sin agua morirás. Para aquellos que Me conocen, Me aman y Me muestran devoción, deben entender una cosa. Si no continuáis recibiendo Mi Cuerpo y rezándome regularmente, perderéis muy rápidamente vuestro deseo por Mí. Sin este deseo os distanciaréis de Mí, hasta que vuestras cabezas serán giradas por la tentación del pecado plantada en vuestras mentes por Satanás. Sin Mí, Verdaderamente Presente en vuestras vidas, no sois nada, hijos Míos.
Mantente en guardia en todo momento. La oración te protege del pecado. Tu devoción a Mí puede atraer al engañador, que se burlará de ti más a menudo. Sin embargo, sin una devoción regular a Mí, caminarás sin rumbo en este mundo.
Los creyentes entienden que la oración puede evitar mucha desarmonía en el mundo. Ya, las oraciones dichas a través de esta vidente y otros videntes, han aliviado los peligros inmediatos que enfrenta el Papa Benedicto, pero no por mucho tiempo. La oración a Mi Santísima Madre puede mover montañas, diluir el impacto de las atrocidades del mal, incluidas las predichas, y convertir a los pecadores.
Recuerda esta lección, hija Mía, la oración actúa como tu armadura contra el engañador. Tú, sobre todo, debes aprender la necesidad de la oración regular en tu Misión. Necesitas pasar más tiempo en reflexión silenciosa Conmigo. Porque cuando no lo haces, tu discernimiento de Mis Mensajes se debilita y pueden producirse errores. Ten cuidado, hija Mía, cuando te refieras a las fechas de las profecías que te han sido dadas. Si Yo digo meses eso puede ser en cualquier momento dentro de un año. Nunca confundas la interpretación humana con las de las líneas de tiempo dadas a ti por Mí. Yo no te he dado ninguna fecha específica para los eventos solo guías. Estas profecías tendrán lugar, pero solo por la Mano de Mi Padre Eterno. Confía más en Mí. Tus oraciones y las de Mis seguidores pueden ayudar a retrasar, o en algunos casos, evitar desastres. Recuerda siempre que.
Reza, reza, reza. Porque cuando lo haces de corazón, tus oraciones son escuchadas. Rezad especialmente por aquellos líderes mundiales cuyas vidas acabarán pronto a causa de odiosos actos de maldad. Ellos y aquellos con corazones endurecidos, culpables del crimen de inhumanidad, necesitan vuestras oraciones más que nadie. Rezad siempre por los pecadores porque amo a todos Mis hijos y necesito vuestras oraciones para salvarlos del fuego del Infierno.
