No hagas caso de los rugidos de la oposición porque la opinión humana no significa nada en Mi Reino

Mi muy querida hija, la perseverancia en el sufrimiento acerca un alma a Mí y Yo recompenso tales pruebas por ello. Nunca subestimes cómo Mi Presencia en un alma nunca pasa desapercibida para el maligno, que es atraído rápidamente hacia aquellas almas donde Mi Presencia es más fuerte. Acepta el sufrimiento en Mi Nombre y comprende que la razón del mismo es por Mí. Si Yo no estuviera presente, el maligno te ignoraría.

Entre las Gracias que Yo prodigo a los que más Me aman y que han dejado de lado todo aspecto de amor propio y de orgullo, está el Don del discernimiento. Este es un Don muy especial del Cielo y benditos son aquellos que tienen la gracia de discernir la Verdad porque ellos son los que nunca serán influenciados por falsedades. Aquellos de ustedes a quienes se les ha dado este Don me traerán almas. Pero por cada alma que Me traigan, y debido a sus oraciones y sufrimiento, el maligno tratará de detenerlos. Sabed que la Gloria de Dios que está presente a vuestro lado atraerá un veneno terrible y seréis maldecidos en Mi Nombre por esas almas débiles, que son como forraje para Satanás y todos los demonios que ha soltado para destruir las almas en la tierra.

Estad en paz y sabed que cuando sostenéis la Verdad -la Palabra de Dios- frente a la adversidad, todo el Poder Mío es esgrimido para salvar almas. Por cada alma que Me traigas te prodigaré más Gracias y así continuará. No hagáis caso de los rugidos de la oposición porque la opinión humana no significa nada en Mi Reino. Debéis veros siempre los unos a los otros como a través de Mis Ojos. ¿No les he dicho esto antes? ¿No entienden la lección más básica, la cual enseñé durante Mi Tiempo en la tierra? Amaos los unos a los otros como Yo os amo. Si no puedes amar a tus enemigos, entonces te será más difícil acercarte a Mí. Si te antepones a los demás, entonces no puedes decir que Me amas incondicionalmente porque si lo hicieras Me dirías

"Jesús no soy digno de estar delante de Ti, pero haz de mí lo que Tú quieras como yo haré lo que Tú quieras".

Id todos y recordad quién Soy Yo. Sólo cuando viváis vuestras vidas de acuerdo con Mis Enseñanzas podréis decir realmente que sois de Mí. No podéis tomar una parte de Mi Palabra y proclamarla en voz alta y luego negar otras partes. A aquellos que declaran su superioridad sobre los demás, y que presentan sus versiones torcidas de Mi Palabra, y cuando esto resulta en el alejamiento de las almas de Mí, les digo esto. El día en que Yo retire Mi Presencia en el mundo, será cuando los poderosos y los orgullosos llorarán lágrimas de ira, y luego se desesperarán, porque entonces sabrán cómo su engaño causó la caída de muchas almas y la ira de Dios les hará temblar. Habrá gritos y crujir de dientes. Pero para entonces, no tendrán a quien recurrir. No tendrán a nadie a quien responder porque nunca verán Mi Rostro.

Tu Jesús