No busco a los malvados para destruirlos fácilmente. Mi único deseo es salvarlos a todos

Mi querida y amada hija, Mi mayor deseo es traer amor, paz y felicidad a todos los hijos de Dios. Nunca deseo venganza, por muy malvados que sean los actos de los hombres. Tampoco busco causar humillación a nadie, aunque puedan humillar a otros en Mi Nombre. Nunca busco arruinar la reputación de un hombre cuando es la causa de mucha destrucción en el mundo. Yo no busco a los malvados para destruirlos fácilmente. Mi único deseo es salvarlos a todos. Aprecio las almas de cada uno de los hijos de Dios. Las busco constantemente. Trato de atraerlos hacia Mí. Incluso aquellos que no aceptan Mi Existencia son buscados por Mí cada día. Yo hago sentir Mi Presencia en sus vidas, llenando sus almas de amor por los demás, atrayendo la bondad que hay en ellos, para que pueda vencer los pensamientos, las obras y los actos negativos.

Algunas almas son naturalmente receptivas a Mí y Yo me deleito con su respuesta generosa y sus corazones tiernos. Otras tienen una barrera entre ellas y Yo, de modo que me resulta difícil tocar sus almas. Pero, seguiré intentando llegar a esa alma de muchas maneras diferentes, hasta que pueda abrir sus corazones al Poder del Amor de Dios.

El amor es la fuerza motriz que conduce a todas las cosas buenas. El amor está presente en cada hijo de Dios desde el momento en que nace. El don del amor de Dios ayuda a la humanidad a vencer al maligno. Cuando Dios intercede y aumenta el amor en un alma, lo hace para defender a Sus hijos contra la maldad del diablo. El amor es más poderoso que el odio, pero el odio es paciente. Satanás, lleno de odio por la humanidad, no tiene amor de ningún tipo, excepto por sí mismo. Infesta a la humanidad sembrando el odio en las almas debilitadas por el pecado. El odio encuentra un hogar fácil en las almas de aquellos que son celosos, llenos de orgullo, solitarios y confundidos. Satanás nunca tentará a un alma al odio presentándoselo como lo que es. En cambio, tentará al alma a través del pecado del orgullo, siempre, como su primera táctica. El alma será llevada a creer que debe ofenderse porque sus propias necesidades así lo dictan, porque él sabe más y que está haciendo algo bueno.

El Amor de Dios se está extendiendo entre todos Sus hijos en este momento. Lo hace por Su Misericordia. Él aumentará el amor dentro de los corazones del hombre para ayudar a la humanidad a luchar contra el odio que pronto se intensificará en el mundo, cuando los corazones de los hombres se vuelvan fríos como la piedra.

Te pido que reces esta Oración de Cruzada para buscar el Amor de Dios en este momento.

Oración de Cruzada (149) Buscar el Amor de Dios

Oh Jesús, lléname del Amor de Dios. Lléname de Tu Luz Divina e inúndame con el amor que necesito para esparcir la semilla de la Misericordia de Dios entre todas las naciones.

Permite que Tu Amor Divino sea difundido por mí entre todos aquellos con los que entre en contacto. Difunde Tu Amor, para que se pose sobre todas las almas, todas las creencias, todos los credos, todas las naciones - como una niebla para embelesar a todos los hijos de Dios en unidad.

Ayúdanos a difundir el Amor de Dios, para que pueda conquistar y conquiste todo el mal del mundo. Amén.

Equipara siempre el amor con la Presencia de Dios. Sabed que sólo el amor puede traerme almas. Sabed que sólo el amor puede venir de Dios. Sólo el amor tiene el poder de traer paz, satisfacción y unidad entre las naciones. El odio viene de Satanás y dondequiera que lo presencies, debes recitar la Oración de arriba para buscar el Amor de Dios. Recuerda que el amor lo conquistará todo porque viene de Dios.

Tu Jesús