El amor puede vencer todas las aflicciones que sufre el género humano

Mi muy querida hija, piensa en Mí, con amor en tu corazón, porque es sólo a través del Amor que Yo me comunico al mundo, a través del Libro de la Verdad.

Por el Mandato de Mi Padre, reúno a todos Sus preciosos hijos, como uno con Él y en Él. Es el Amor, lo que permite esta Intervención Divina. Mi Padre soporta el Dolor, la Ira, la Impaciencia y la Frustración, debido a la mancha del pecado, que arruina las almas de cada uno de Sus hijos. Pero es Su Amor eterno por todos ustedes, lo que mantiene la Luz de Dios encendida en la Tierra.

Sin esta Luz, sólo habría oscuridad, no sólo de espíritu, sino en la Tierra misma. La luz del día no existiría. El sol no brillaría, ni la luna iluminaría la noche. Las estrellas desaparecerían. Sin embargo, todos estos Dones permanecen gracias al Amor de Dios. Cuando este Amor es correspondido, trae gran alegría a Mi Padre, porque Él sabe que una vez que el espíritu de amor está presente en las almas, puede vencer toda la oscuridad del alma.

El amor puede vencer todas las aflicciones que sufre la raza humana. El amor mutuo destruirá el mal. El amor a Dios destruirá el poder de Satanás sobre el hombre. La lealtad a los Mandamientos de Dios perfeccionará el alma y, a su vez, salvará a la raza humana del destierro y la separación de Dios.

Cuando la Luz de Dios es retenida en vuestros corazones y el Amor de Dios por los demás está presente en vuestras almas, entonces todo mal puede ser y será vencido. Cuando amáis a Dios, sentiréis una profunda paz dentro de vosotros, porque cuando le mostráis vuestro amor, Él os colmará de Sus Gracias. Debéis consolaros siempre con el poderoso Amor que Dios tiene en Su Corazón por cada uno de vosotros. Quienquiera que seas, cualquier agravio que puedas haberle causado y no importa cuán perversos sean tus pecados, Él te perdonará - siempre. Todo lo que debéis hacer es invocarle, pidiéndome a Mí, Su Hijo amado, Jesucristo, que intervenga en vuestro favor a través de la reconciliación.

Ven a Mí con tu oración y di: "Jesús, llévame bajo Tu Refugio a mi Padre y tráeme la Salvación Eterna " .

Cuando vengas a Mí, con verdadero remordimiento en tu alma, tuyo será el Reino de los Cielos.

Tu Jesús