Nunca ignoraré a los que están solos, tristes, asustados e inseguros sobre si Dios existe o no.

Mi muy querida y amada hija, a medida que Mis Mensajes se difundan y enciendan la necesidad de animar a muchos a volverse hacia Mí, muchos milagros serán presenciados.

Los no creyentes, los de toda fe y los que se han apartado de Mí a causa de su vida pecaminosa, se convertirán. De eso os prometo. Los que tienen los ojos cerrados los abrirán. Aquellos con odio en sus corazones llorarán lágrimas de alegría cuando el peso de su carga sea levantado. El hombre que no Me conoce en absoluto Me reconocerá. Muchos vendrán y Me llamarán y la Presencia del Espíritu Santo será sentida por muchos, cuando finalmente acepten que Yo he intervenido para salvarlos de todo mal.

Hija Mía, por favor tranquiliza a todos aquellos que se sienten tristes por la forma en que Mi Existencia en el mundo está siendo negada. Diles, que aunque todo rastro de Mí será vencido, que por la Gracia de Dios, continuaré iluminando las almas de aquellos que Me llamen. Nunca abandonaré a los Míos. Nunca ignoraré a aquellos que están solos, tristes, asustados e inseguros de si Dios Existe o no. Con sólo apartar su orgullo y pedirme una señal de Mi Presencia, Yo les responderé. Nunca antes he intervenido en tan gran magnitud, como lo hago ahora. Es debido a Mi Deseo de salvar a toda la humanidad, que Me abriré paso a través de los corazones de aquellos que, hasta ahora, Me han negado, siempre y cuando Me llamen.

Espero vuestra respuesta. Anticipo el amor y la alegría, con los que llenaré vuestros corazones y almas, en el momento de la reconciliación, porque esa es la dulzura de vuestra conversión. Ese será el momento en que desbloqueéis vuestra alma y permitáis que la Luz de Dios os traiga el Regalo más grande que jamás podríais imaginar: el Regalo de la Vida Eterna.

Tu Jesús